Tras la muerte hace casi dos años de Carmen Franco, la única hija de Francisco Franco y Carmen Polo, como consecuencia de un cáncer terminal, sus descendientes están aún inmersos en la gestión de su gran patrimonio, compuesto por más de 200 propiedades y 102 millones de euros. Un legado que, tal y como remarcó recientemente el abogado de la familia Luis Felipe Utrera-Molina, provendría en su mayoría de la familia de los Polo.
«Cuando hablan de la fortuna de los Franco, en realidad tendrían que hablar de la fortuna de los Polo. Carmen Franco no solo heredó de su madre, que tenía un importante patrimonio, sino también de su tía Isabel Polo, que falleció sin descendencia. La mayor parte del dinero de la familia proviene por esa rama, no por la de Franco», dijo el letrado recientemente, con motivo de la exhumación de Franco.
Ahora, parece que la familia ha decidió poner en venta algunas de las pertenencias más valiosas de la herencia (además de algunas carísimas propiedades), como las joyas. Se trata de tres importantes piezas: un juego de pendientes, un collar de esmeraldas y brillantes y un anillo de diamantes cuyo valor conjunto ascendería a unos 400.000 euros. Y se pondrán a la venta a través de la prestigiosa casa de subastas Christie's.
Enmarcadas dentro de una colección denominada como «joyas importantes», compuesta por 300 piezas, saldrán a subasta el miércoles 27 de noviembre en la sede de la empresa en Londres. En la página web indican que se trata de unas joyas «propiedad de una importante familia española», pero sin llegar a especificar de cuál se trata. En este mismo espacio se indica que las joyas se podrán comprar en lotes separados (pues se anuncian de forma individual), aunque se especifica que los pendientes y el collar de esmeraldas pertenecen a la misma colección.
El conjunto de diamantes y esmeraldas lo lució Carmen Franco en la boda de la infanta Elena y Jaime de Marichalar, aunque la última que los llevó en público fue Margarita Vargas, mujer de Luis Alfonso de Borbón (nieto de Franco), en una gala de entrega de premios en el año 2016. El anillo, por su parte, es tal vez la pieza más desconocida y valiosa y podría llegar a venderse por un precio que oscilaría entre 140.000 y 210.000 euros. El valor del collar en la subasta rondaría entre 93.000 y 140.000, y los pendientes podrían alcanzar los 58.000 euros.
