No es santo de mi devoción, pero debo de reconocer que Marcelo Ebrard es el funcionario del gabinete de López Obrador que más oficio político tiene, y que su resorte se mueve de inmediato cuando el presidente se encuentra en problemas.
Lo vimos ayer cuando el titular de Relaciones Exteriores viajó a Bavispe, Sonora, para ver de primera mano la zona donde asesinos masacraron a integrantes de la familia Lebaron, y seguramente se reunió con los deudos y vecinos de esa zona.
Que fuera Marcelo Ebrard quien estuviera en Bavispe es inusual (uno esperaría la presencia de Alfonso Durazo, o de Olga Sánchez Cordero), pero no inexplicable, pues siendo los fallecidos y heridos ciudadanos con nacionalidad estadounidense, corresponde al titular de la SRe estar al pendiente de ellos.
Y no es la única acción realizada por Ebrard para aliviar presión a la figura presidencial. Por la mañana de ayer el canciller estuvo involucrado personalmente en la llamada telefónica entre Andrés Manuel López Obrador y su homólogo estadounidense Donald Trump, quien de plano se atrevió a sugerir el envío de fuerzas de su país para capturar y castigar a los culpables de tan abominable ataque. Tambié se reunió con el embajador estadounidense en México.
Algo similar hizo Marcelo Ebrard tras la famosa batalla de Culiacán, pues el secretario también organizó una llamada telefónica entre AMLO y Trump, y de igual manera sostuvo una reunión con el embajador Christopher Landau.
El trabajo de Ebrard es muy diferente al de otros secretarios de Estado, quienes se quedan callados, o simplemente tratan de justificar lo que ocurra mediante excusas que a veces parecen banales.
Insisto en que Marcelo Ebrard no es un personaje que me guste mucho por sus convicciones ideológicas, pero si yo fuera presidente, me gustaría contar con él a mi lado para que me ayudara a resolver problemas, a diferencia de tantos otros personajes cercanos.
Viendo el actuar de Ebrard, me atrevo a pensar que si algún día sobreviene un cambio en la Secretaría de Gobernación, el personaje que ocupará ese cargo es el exjefe de gobierno de la Ciudad de México.
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