En poco más de una semana estaremos votando, en nuestras cuartas elecciones en cuatro años. Al margen de quien presidirá el próximo Gobierno, con el cargo tanto Pedro Sánchez,
Pablo Casado o, incluso, Albert Rivera podrían pasar cuatro años como realquilados en el Palacio de La Moncloa. Pero, ¿a quién le confiaríamos tan ilustre residencia? ¿Y nuestra propia casa? Estas son las preguntas a las que han tenido que responder los usuarios de la plataforma de reservas de alquiler de viviendas «Spotahome». Entre las principales conclusiones de la encuesta realizada por esta startup española, el 49% de los participantes no le alquilaría su casa a ninguno de los candidatos que concurrirán el 10-N.
El resto de los encuestados reparte su apoyo en alguno de los candidatos que se presentan el próximo 10 de noviembre. El presidente del Gobierno en funciones y líder del PSOE apenas conseguiría el apoyo del 14% de los encuestados para alquilarle su vivienda, le seguirían el candidato de Unidas Podemos, Pablo Iglesias (12%) y de Santiago Abascal (11%).
Además, según este estudio, a la hora de elegir a qué político le «alquilarían» La Moncloa, el 23% de los participantes no se han pronunciado sobre ningún candidato. En paralelo, uno de cada cuatro encuestados optaría por el actual presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez. Le seguiría su némesis en la izquierda, Pablo Iglesias (Unidas Podemos) con un 17%, el presidente de Vox y candidato a la presidencia, Santiago Abascal, con un 15%. Mientras que el popular Pablo Casado y Albert Rivera (Ciudadanos) han cosechado un 12% y un 8%, respectivamente.
Para Emilia REnedo, marketing manager de «Spotahome», los resultados anteriores dejan clara que «cuando se trata de su propia casa, los requisitos son mucho mayores y entran en juego, más que la ideología, los estereotipos sociales». Para esta experta, para alquilar las personas necesitan «tener más garantías del inqulino» para evitar problemas y que cumpla con los pagos.
La startup española también ha desplegado durante los días previos a las elecciones una campaña bajo el lema «¿A qué inquilino alquilarías La Moncloa?» en un típico autobús londinenste por las principales calles de Madrid.
