Un tribunal federal ordenó a un juez de Jalisco resolver si , El jefe de jefes, líder del extinto , tiene que compurgar la totalidad de la sentencia de 37 años de prisión.
Para evitar una afectación material en su derecho a la libertad personal, el juez Cuarto de Distrito de Amparo en Materia Penal en Jalisco, debe estudiar el amparo donde se alega que no fue correcto el cómputo del juez que ratificó la sentencia.
Lo anterior, porque el narcotraficante podría estar privado de su libertad más tiempo del que fue condenado.
“Debe tenerse en cuenta que, para determinar la fecha de compurgación de la pena, el juez debió realizar un cómputo teniendo en cuenta, al menos, el tiempo que el sentenciado ha estado privado de su libertad y la pena de prisión impuesta en la sentencia definitiva.
“Este ejercicio, como ya se dijo, puede tener un impacto material en la libertad del quejoso, pues cabe la posibilidad de que, frente a un cómputo incorrecto, aumente o disminuya —de facto— el tiempo que deba estar en prisión el sentenciado”, detalló el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito.
Los magistrados resolvieron un conflicto competencial, luego de que el juez Noveno de Distrito de Amparo en Materia Penal en la Ciudad de México y el juez Cuarto de Distrito de Amparo en Materia Penal con sede en Jalisco, declinaron conocer el amparo promovido por Félix Gallardo.
La defensa del narcotraficante alegó que el cómputo que realizó el juez Noveno de Distrito de Procesos Penales Federales en la Ciudad de México, quien confirmó la sentencia de 37 años de prisión, el 28 de marzo de 2019, realizó un conteo erróneo.
Félix Gallardo se encuentra interno en el penal de máxima seguridad de Puente Grande, Jalisco. Fue sentenciado como responsable de participar en el homicidio del agente de la DEA, Enrique Camarena Salazar y del piloto mexicano Alfredo Zavala Avelar, crimen cometido en 1985, en Guadalajara.
En la década de los 80, Félix Gallardo tuvo como sus subordinados, entre otros, a Amado Carrillo Fuentes, El Señor de los cielos; Héctor Luis El Güero Palma Salazar, Joaquín El Chapo Guzmán y los hermanos Arellano Félix; además de Rafael Caro Quintero y Ernesto Fonseca Carrillo, Don Neto, quienes después se convirtieron en los principales barones de la droga y terminaron iniciando una guerra entre ellos.
En su demanda de garantías, Félix Gallardo argumentó que tiene más de 70 años y su estado de salud es precario, motivo por el cual alcanza el beneficio de la prisión domiciliaria, y advirtió que no concedérsela sería un acto de discriminación.
No obstante, el Tribunal resolvió que el otorgamiento de la prisión domiciliara, por edad, constituye una facultad potestativa del Poder Judicial, es decir, no es un derecho de la persona sino una facultad de la autoridad judicial y dependerá de cada caso en específico si la persona puede o no cumplir con la pena impuesta.