Trece años después del oro de España en Japón, el que fue jugador número 12 en aquel torneo ejerce el liderazgo de la selección con lealtad a la llamada que le cambió la vida
La semana pasada se cumplían 13 años del oro de España en el Mundial de Japón. La cota más alta de un equipo legendario que ya venía coqueteando con las medallas y que, desde entonces, ha estado presente en 10 de los 12 podios posibles en las grandes citas. Un aniversario trascendental en la historia del baloncesto español y crucial para la vida de Marc Gasol. “En 2006 era un chico muy joven. Llegué al grupo sin saber muy bien a dónde iba pero, gracias a la selección, entendí lo que era el baloncesto profesional. A partir de ahí, todo ha ido para arriba”, contó el campeón de la NBA antes de partir a China con el cartel de líder plenipotenciario del equipo de Scariolo. España llega a la semifinal mundialista frente a Australia (este viernes, 10.00, Cuatro) iluminada por Ricky y abrazada como nunca a Marc para chocar contra la roca oceánica.