Pemex aún no ha demostrado a las refinerías de petróleo a lo largo de la costa del Golfo de México y otros compradores sus nuevas fórmulas para fijar el precio del crudo del país, según personas familiarizadas con la situación.
Petróleos Mexicanos vende su crudo con base en precios de múltiples grados de crudo y fuel oil alto en azufre. Las nuevas fórmulas que buscan eliminar el fuel oil del precio del crudo establecido por PMI -el boletín comercial de Pemex- aún no han sido aprobados dentro de la compañía, lo que retrasó los planes para obtener comentarios de los clientes sobre el nuevo precio este mes, asegura una de las personas.
La fórmula propuesta incluye la adición de crudo West Texas Intermediate de Estados Unidos, asegura la persona. Por lo general, existen fórmulas diferentes para que EU, Asia y Europa reflejen diferentes puntos de referencia en las regiones. Las refinerías que compran crudo Maya esperaban ver la fórmula, afirman las personas.
La fórmula respalda no solo todas las ventas físicas de crudo realizadas por Pemex, sino también la cobertura soberana anual de México, la más grande de su tipo. La demora en finalizar la fórmula podría complicar los esfuerzos de los bancos para mitigar su riesgo de la cobertura, ya que necesitan usar una combinación de futuros y opciones de petróleo líquido.
Pemex no respondió de inmediato a una llamada telefónica y un correo electrónico en los que sí solicitó comentarios.
La llamada cobertura de Hacienda se considera una de las más secretas de Wall Street. Históricamente, la Secretaría de Hacienda ha comprado opciones que le dan el derecho de vender crudo a un precio futuro predeterminado a un pequeño grupo de bancos de inversión y empresas petroleras. Un comité interno dentro del gobierno mexicano aprobó la decisión de cubrir la producción de petróleo del país para el próximo año, dijeron personas familiarizadas con el asunto el mes pasado.
La decisión de eliminar el fuel oil, con alto contenido de azufre, de la fórmula de fijación de precios para el crudo mexicano es el resultado de emisiones emitidas por la Organización Marítima Internacional conocidas como IMO 2020, las cuales exigen que los barcos cambien a combustibles con bajo contenido de azufre a partir de enero del próximo año. Se espera que esto reduzca drásticamente su demanda, lo que provocará una relevancia significativa del precio.
