Los pocos aficionados españoles que se citaron en las gradas del Shanghai Sports Center se hicieron oír durante todo el partido ante Polonia. Con la victoria (90-78), un cántico inundó la zona del graderío en la que estaban los hinchas de la Roja, incluidos numerosos familiares de los jugadores: «Sí, sí, sí, nos vamos a Pekín».
El cántico estuvo inspirado en el mítico «Sí, sí, sí, nos vamos a París» que cantó el público del Benito Villamarín en el 12-1 del España-Malta de 1983 y que clasificó a España para la Eurocopa de Francia.
La selección vivirá ahora un nuevo traslado en la Copa del Mundo. La cantidad de sedes y la extensión del país asiático han provocado numerosas quejas en los diferentes equipos participantes. Aunque Argentina y España, los primeros clasificados para semifinales, den ahora todos los sacrificios por bien empleados.