Gustav Iden fue para la gran mayoría la gran sorpresa del día en Niza, era al menos para nosotros, así lo dijimos en la previa, uno de los 5 hombres con opciones reales de llevarse la prueba, junto a Kienle, Noya, Alistair y su compatriota Blummenfelt.
Quizás de los 5 era el que menos contaba, pero hay que recordar que Iden debutó en un IRONMAN 70.3 con justo hace 3 años y 3 meses, con tan solo 20 años y ganó a gente contrastada como Nils Frommhold y Philip Ospaly.
Su carrera a pie es una de las más rápidas de la historia, respecto al Mundial 2018 el tiempo es más lento, pero en sudáfrica probablemente los 21 km fueron cortos.
En Niza todo indica que estaba bien medido, según los GPS, 20,89 km para Iden y 21,26 km para Blummenfelt
Gustav inició la media maratón a 3:18 el primer kilómetro con 11 sg de Brownlee. Después 3:10 – 3:11 y 3:15 hasta el km 4, donde fue alcanzado por Alistair Brownlee, esto supuso que Brownlee tuvo que hacer esos tres km a un promedio de 3:08 para alcanzar al noruego.
En esos momentos Iden metió 3 km a 3:08, dos de ellos, del 4 al 6 reventaron a Alistari Brownlee quien justo al paso del km 6 comenzó a quedarse; le supuso un 5000 a 3:08 es decir en 15:40. Después Iden metio el km 7 a 3:08 que terminó de rematar la faena.
Después mantuvo una velocidad de crucero, hasta el km 13 por debajo de 3:15 y los 7 km finales por encima de 3:15 y por debajo de 3:19, con un kilómetro final a 3:51 con el festejo incluido.
Pero otro dato interesante fue su pulso estable en todo momento, incluso en el tramo letal del 4 al 7, fue en el 7 donde tuvo el mayor pico, 185 pulsaciones de forma puntual, pero todo el camino entre 178 y 182.
