Los ingresos presupuestarios estimados para 2020 ascenderían a 5,511.9 miles de millones de pesos, lo que representaría una variación de cero por ciento respecto a los ingresos que se esperan para el cierre del presente ejercicio, de acuerdo con el Presupuesto Económico de 2020 divulgado este domingo por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Según el informe, los menores ingresos se explican principalmente por la reducción esperada en los ingresos petroleros, derivado en gran medida por un menor precio del petróleo y del gas natural.
De manera desagregada, se espera que durante el próximo año los ingresos petroleros aumenten 4.5 por ciento respecto a 2019, por lo que se estima una captación de 987.3 millones de pesos.
El documento publicado por Hacienda reveló que este crecimiento está sustentado en la recuperación que ha mostrado la plataforma de producción de petróleo esperada para el siguiente año, que se beneficiará de los apoyos fiscales que ha recibido Pemex durante 2019, así como de los previstos para 2020.
“La mayor producción le permitirá a la empresa compensar el efecto de los menores precios internacionales esperados, que ubican a la mezcla mexicana en un precio promedio anual de 49 dólares por barril para 2020”, detalló el informe.
Al interior de este componente, los ingresos petroleros provenientes del Gobierno Federal mostrarían una reducción de 10.5 por ciento, mientras que los propios de Pemex aumentarían en 18.7 por ciento.
Respecto a los ingresos no petroleros, mismos que cubrirán el 82 por ciento de la captación presupuestaria de 2020, se observó una caída de 1 por ciento respecto al cierre estimado en 2019.
Para los ingresos tributarios sin IEPS de gasolinas, se espera un monto de 3,157.4 mil millones de pesos, lo que implicaría un crecimiento anual de 3.2 por ciento.
“Ello se explica, por un lado, por las medidas de corte administrativo que se proponen en la ILIF 2020, y por el otro, por las ganancias esperadas en eficiencia recaudatoria por parte de la autoridad fiscal y el combate irrestricto a la evasión y elusión fiscales”.
El secretario de Hacienda, Arturo Herrera, comentó en la entrega del Paquete Económico 2020 al Congreso que el IEPS es un impuesto a productos que al consumirse producen un mal, por lo que su objetivo es disuadir su consumo, y si esto no se logra, que al menos se logre recaudar dinero con ello, como sucede con la venta de productos como el tabaco, el alcohol o las gasolinas.
La recaudación tributaria total, (la que incluye el IEPS de gasolinas), se estima crezca a una tasa real anual de 3.7 por ciento con respecto al cierre de 2019.
“Lo anterior se explica por el comportamiento esperado en 2020 de las referencias internacionales de las gasolinas y el diésel respecto a lo observado en 2019”, resaltó el documento entregado por Hacienda.
El informe puntualizó que las tasas del IEPS que aplican a esos bienes solo se actualizarán por inflación, como establece la Ley de dicho impuesto, y durante 2020 se seguirán aplicando los mecanismos para suavizar los precios, a fin de mantenerlos constantes en términos reales.
