Orestes está de celebración en «Pasapalabra». Este miércoles se encontraba en la tesitura de tener que recuperar la silla azul, pero la presión por lograrla, tal y como ha asegurado, era mayor de lo normal. Y es que Orestes estaba logrando una gesta si conseguía tomar su asiento: cumpliría 100 programas seguidos en «Pasapalabra».
Pasapalabra
Gracias a sus conocimientos con la letra «G», Orestes consiguió sentarse en su programa número 100 de nuevo en la silla de «Pasapalabra». Al conseguir asegurar su participación durante, al menos, un día más en «Pasapalabra», Orestes quiso agradecer el hito, en especial, a su familia. «¿Quién me iba a decir en abril que llegaría a estar aquí todavía en septiembre?», aseguró ante Christian Gálvez.
«Quería agradecer a los dos equipos haber estado en el programa 100, ha sido muy especial. Quería agradecérselo a mi familia, y en especial a mis padres y mi hermano por soportarme en todas mis facetas, tanto cuando estoy más gracioso y también cuando estoy de mal humor. Si no hubiera sido por vosotros no habría llegado a ningún lado. Además, es un placer llegar con Rafa, que estamos teniendo unos duelos muy divertidos», aseguró Orestes justo antes de comenzar su rosco centenario.
A pesar de la alegría propia del momento de Orestes, la alegría se le acabó en el momento en el que tuvo que completar el rosco. Y es que, al igual que lleva pasando en los últimos días, Rafa consiguió ofrecer más respuestas acertadas que el centenario concursante y Orestes vuelve a estar en peligro.
En concreto, Rafa logró contestar, de forma correcta, un total de 22 preguntas, mientras que Orestes se quedó en tan solo 20. A pesar de tener 10 segundos más de tiempo que su contrincante, Orestes no pudo superar a su rival de nuevo. En total, consiguió acertar 20 cuestiones de las que se le planteaban, mientras que acumuló un total de cuatro errores, algo completamente inesperado.
Ante esta situación, el bote, que ya supera los 900.000 euros, continúa todavía sin propietario, pero lo que más ha sorprendido es que, a pesar de tener todo a favor este día Orestes para conseguir convertirse en el ganador de la jornada, ha vuelto a caer derrotado, poniendo en peligro su permanencia en el programa al tener que enfrentarse a un nuevo duelo para sentarse en la silla azul. Esto, aunque en un principio pueda parecer improbable, le sucedió de forma inesperada a Jero al enfrentarse a una novata Isabel por la silla azul.
