Fernando Torres afirmó hoy que siempre llevará en el corazón al Sagan Tosu y a su afición, durante una ceremonia organizada por este equipo japonés tras el partido en el que el delantero español se despidió del fútbol profesional.
«El Niño» fue homenajeado este viernes en el Estado de Tosu al término del encuentro de la J-League en el que el Sagan cayó derrotado por 1 a 6 frente al Vissel Kobe de Andrés Iniesta, y con el que el exjugador del Atlético de Madrid pone fin a una carrera de 18 años en la élite.
El club nipón organizó una emotiva ceremonia sobre el césped de un estadio repleto, que incluyó la proyección de mensajes de vídeo de excompañeros de Torres como Steven Gerrard y de algunos de los goles más importantes de su carrera, como el que el ariete anotó en la final de la Eurocopa de 2008 que dio el título a la Roja.
Torres, quien llegó en julio de 2018 a Japón tras cerrar su última etapa en el Atlético, quiso enviar un mensaje de agradecimiento a la directiva del Sagan y a su afición por «toda la confianza» depositada en él y por «recibirle con los brazos abiertos» y «ayudarle a adaptarse a Japón».
Dijo haber aprendido «muchísimas cosas» de sus compañeros y de todos los japoneses, en particular «el respeto a todas las personas y a todo lo que nos rodea», según destacó ante un público que exhibía numerosos mensajes de agradecimiento en español y en japonés hacia el futbolista originario de Fuenlabrada.
Para corresponderles, el futbolista depositó sobre cada asiento del Estadio de Tosu una emotiva carta escrita a mano en español, y traducida al japonés:
«Cuando tenía 5 años empecé a jugar al fútbol con mi hermano. 30 años después voy a jugar mi último partido como profesional. Hoy miro atrás y casi no puedo creer todo lo que he vivido. Me siento muy afortunado de haber podido conseguir los trofeos más importantes del mundo y de haber jugado para algunos de los clubes más prestigiosos. También de los éxitos con la selección española. He vivido sensaciones de gran emoción y felicidad.
Quería dar las gracias al fútbol por haberme hecho tan feliz. Pero no quiero olvidarme de la parte más auténtica del fútbol, la que hace que este deporte sea tan maravilloso, los aficionados. Gracias a todos y cada uno de los aficionados de los equipos en que he jugado por quererme, animarme y respetarme. También a aficionados rivales porque me habéis hecho ser mejor jugador. Espero que os haya hecho disfrutar con mi fútbol y os haya inspirado de alguna manera. Nunca dejéis de perseguir vuestros sueños. Ha sido un verdadero placer. Gracias fútbol, gracias afición».