El incendio de la cumbre de Gran Canaria, iniciado el pasado sábado 17 de agosto en el municipio de Valleseco, afecta actualmente a un perímetro de 60 kilómetros, en el que se han quemado más de 6.000 hectáreas y ha obligado a desalojar a unas 9.000 personas de ocho municipios de la isla.
Así lo ha manifestado el presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, este lunes durante la rueda de prensa para informar de la evolución del incendio forestal, en la que ha estado acompañado por el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas.
Torres expuso que la mayoría del incremento de superficie quemada pertenece al parque natural de Tamadaba, de tal forma que las zonas habitadas se han podido, gracias al esfuerzo de los efectivos, «ser contenido», permitiendo que no avanzara en dicha zona.
Apuntó que hay dos espacios en el incendio, por un lado la cola, donde se ha trabajado «intensamente», pudiendo contener el fuego en las zonas de Lanzarote, Valleseco hasta Fontanales, y por otro lado está la cabeza, que avanza hacia Tamadaba, que es la parte «más complicada», por las llamas de hasta 50 metros y zonas de hombre muerto --riesgo de atrapamiento--.