España está para competir con Estados Unidos. Es la mejor noticia que se extrae de una derrota (90-81) que en realidad fue el anuncio de que la selección está capacitada para pelear en uno de los capítulos decisivos del Mundial con los norteamericanos. Los yanquis no son claros favoritos para la Copa del Mundo, pero sí favoritos. Sin nombres "top", salvo Walker y Middleton, los estadounidenses siguen teniendo un equipazo. Lo contrario sería engañarse. Es la selección USA que más se adapta al juego FIBA en los últimos años. Siete de sus jugadores anotaron entre 8 y 15 puntos, apuestan por el juego colectivo, tienen tiro exterior, tienen físico, están obligados a tener hambre... pero España evidenció que se les puede hacer pupa. Y no sólo España. Serbia, Grecia, Lituania, Argentina... Los yanquis están en la "pole" del Mundial, pero...
Horas antes de su primer amistoso, Estados Unidos sufría la enésima baja. Los problemas físicos acababan con PJ Tucker, gran defensor y tirador de los Rockets de Houston. Así que marcada por una interminable lista de bajas, la selección más anónima de Estados Unidos en muchos años se tomó el partido ante España muy en serio. Con Gregg Popovich en el banquillo no se podía esperar otra cosa. Los yanquis están obligados a jugar como un verdadero bloque, a compartir mucho el balón, a defender muy fuerte y todo eso hicieron ante España.
Scariolo apostó por un quinteto que suena a titular. Ricky y Marc son los dos pilares básicos. Juancho y Claver aportan centímetros y versatilidad y la posición de dos, con Rudy, es la que más baila. España asimiló el intercambio de golpes hasta el ecuador del primer cuarto. Había muchos puntos, muchas rotaciones y los estadounidenses demostraron que tienen recursos de sobra para generar problemas a cualquiera. Su juego colectivo fue consistente, anotaron de fuera con buenos porcentajes (7/11 en triples al descanso) y la defensa fue tan agresiva como si el partido fuera de verdad. Pronto se marcharon por encima de los diez puntos y España no se desmayó gracias a las rotaciones y a la defensa zonal. El cambio atrás fue un subidón para el equipo nacional, un arma básica para el futuro. Mediado el segundo cuarto y cuando los norteamericanos se escapaban (47-32), Scariolo ordenó una zona. Los ataques yanquis se atascaron. En el primero sonó la bocina, llegaron dos pérdidas y Estados Unidos nunca se encontró cómodo ante ese tipo de defensa.
Fue lo mejor de España en California. Además de la zona, el equipo, con Marc como pilar, sólo encajó dos canastas en los cinco primeros minutos del tercer cuarto. Las diferencias se redujeron por debajo de los diez puntos y la igualdad fue constante en los últimos tres periodos. Llull y Rudy dieron varios pasos al frente. Ambos son indispensables si ofrecen su mejor versión en ambos lados de la pista. España peleó hasta el final. Cuando los yanquis lograron su máxima diferencia (78-60), volvió la zona y regresaron las dificultades para los de Popovich (80-72, min 36). Tres triples de Marc le convirtieron en el máximo anotador del equipo y fueron la constatación de que los pilares del grupo son él y Ricky. A otros, como a los hermanos Hernangómez, se les echó de menos.
Después del primer examen de verdad llegará el quinto amistoso el próximo jueves en Madrid ante la República Dominicana.
90. Estados Unidos (31+23+17+16): Walker (8), Middleton (10), Mitchell (15), Barnes (2) y Plumlee (0) -quinteto titular- Turner (8), Kuzma (7), Tatum (11), Harris (3), Fox (2), López (8), Brown (9) y White (4).
81. España (20+21+17+23): Ricky (16), Rudy (6), Juancho (4), Claver (0) y Marc (19) -quinteto titular- Llull (11), Rabaseda (0), Ribas (5), Willy (6), Oriola (8), Colom (4), Diop (2), Beirán (0) y Fernández (0).
Incidencias: 6.000 espectadores en el Honda Center de Anaheim (California). Cuarto partido amistoso de preparación para la Copa del Mundo de China de España.
