El belga marca su primer gol en su sexto partido con el Madrid, en un encuentro en el que los blancos ganaron en orden con la vuelta de Casemiro y se desinflaron al final
La primera de las grandes esperas del verano madridista se alivió ayer con el estreno goleador de Eden Hazard en su sexto partido de blanco. El tanto permitió la segunda victoria del Madrid en la pretemporada, algunas alegrías del belga en ataque, y poco más en un partido en el que destacó el orden que trajo el regreso de Casemiro. Se desahogó Hazard, pero de fondo latía aún la incomodidad de otra de las grandes esperas: como la semana pasada para la Audi Cup, Gareth Bale, la compra más cara del club antes del belga, ni siquiera viajó y ese nudo fundamental en la reorganización del equipo sigue sin deshacerse.