A pesar de que el presidente de la Generalitat ha pedido calma esta mañana y que cada uno se haga responsable de sus competencias, la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, se ha mostrado mucho más proactiva por lo que se refiere al recibimiento del Open Arms, el barco con 121 inmigrantes que pidió ayer acogida en algún puerto del Mediterréno. Oltra ha ofrecido los puertos de Alicante y Valencia como puntos de desembarco y ha asegurado que espera abordar este tema en la reunión que mantendrá esta tarde en Valencia con el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez.
La vicepresidenta del Consell ha realizado este anuncio tras su encuentro en la capital alicantina con el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, en el que han tratado una reordenación de los servicios sociales en la Comunitat, a partir de la ley de Servicios Sociales Inclusivos.
La también portavoz del Consell y consellera de Igualdad y Política Inclusiva ha avanzado que espera “novedades” tras su reunión con Sánchez en relación con el barco Open Arms.
“Estamos mejor preparados que con el Aquarius”, ha señalado Oltra, en referencia al barco que el año pasado desembarcó a 630 migrantes en València.
Tras esa experiencia, Oltra ha considerado que ya se ha demostrado su capacidad para “coordinar los dispositivos de emergencia y de asistencia” a las personas rescatadas.
“En esta ocasión”, ha continuado la vicepresidenta, “son 121 personas las que hay que atender”, menos que con el Aquarius, aunque ha subrayado que en el Open Arms “viajan más menores”.
Oltra ha incidido en que ha sido el alcalde de Valencia, Joan Ribó, quien ha ofrecido el puerto de esa ciudad para acoger el barco Open Arms. “La Generalitat tendrá que aprobar” el desembarco, ha advertido, y el atraque “podría ser en Valencia o en Alicante”, ha dicho.
Por su parte, Mazón ha manifestado que “nadie debe dudar de la sensibilidad de Alicante hacia este drama humano” y ha asegurado que la Diputación alicantina “se pondrá a disposición del Gobierno español”, que es quien tiene las competencias para aprobar o denegar el desembarco.
Mazón ha ofrecido su “buena disposición” para que los migrantes puedan llegar a Alicante.
Open Arms, cuya embarcación navega frente a la isla italiana de Lampedusa y no tiene permiso de las autoridades del país transalpino para atracar en su costa, demandó ayer “urgentemente” un puerto en el que dejar a las 121 personas que han rescatado y subido a bordo -entre ellas, dos bebés mellizos, dos niños y tres mujeres embarazadas-, tras dos rescates.
