El plan de reestructuración acometido por OHL empieza a dar sus frutos. Según el comunicado remitido por la compañía a la CNMV, la constructora redujo un 98% sus pérdidas en el primer semestre, que pasaron de 843 millones a 15,3 millones de euros. Además, el ebitda se situó en 22,7 millones de euros, frente a las pérdidas de 104,4 millones del primer semestre de 2018.
La compañía ha resaltado en un comunicado que esta recuperación se explica «gracias a las medidas implementadas y que se articulan en torno al control de caja, un estricto reconocimiento de ingresos en los proyectos y la reducción de costes de estructura». Todas las divisiones del grupo presentaron un ebitda positivo.
La cifra de negocio de la compañía cayó un 5,5%, hasta los 1.361 millones de euros. Gran parte de esta cuantía fue aportada por el área de construcción, que registró unas ventas de 1.123,3 millones (un 8,2% menos). La cartera industrial aportó 95,8 millones (un 5% más) y la de servicios obtuvo 135,6 millones (un 6,2% más).
Esta división, no obstante, se vio afectada por la rescisión de varios contratos, tanto por parte de Aleatica (antigua filial de Concesiones) como por la autopista Atizapán-Atlacomulco (México) y la Autopista Río Magdalena (Colombia).
Respecto a la deuda neta, esta cayó un 72,7% y se estableció en 80,7 millones de euros. La posición de la liquidez disponible con recurso se sitúa en 823,7 millones de euros, gracias a los esfuerzos realizados en la gestión de tesorería y la disciplina implementada.
Al final del semestre, la cartera de OHL a corto plazo alcanzó los 5.536,8 millones de euros, con una contratación hasta junio de 1.520,3 millones de euros. Respecto al negocio constructor, la cartera alcanza un importe de 4.951,0 millones de euros, lo que representa 25,3 meses de Ventas. Además, las nuevas adjudicaciones de proyectos de construcción en el primer semestre supusieron 1.332,2 millones de euros.
