Qiao Bilou, una de las influencers más populares de China se hacía destacar por una apariencia casi perfecta, tan así que la mayor parte de su audiencia la llamaban «su alteza Qiao Bilou».
Para sus seguidores, su identidad siempre era un misterio hasta el pasado 25 de junio donde accidentalmente reveló su propio rostro: en una transmisión en vivo hubo un fallo técnico en los filtros faciales de las redes sociales chinas, por lo cual la vloguera se vió forzada a mostrar su verdadera cara y confesar su edad.
Tras el fallo técnico su anonimato ya no era posible, Qiao Biluo confesó tener 58 años y demostró su verdadera cara, la misma que decía tener 25 años. De esta manera el misterio de su verdadero aspecto acababa: en el pasado había incluso prometido mostrar su cara a cambio de 14.500 dólares.
Según el diario digital Global Times of China, algunos de los seguidores más fieles de la audiencia la adoraban y la llamaban «Diosa» e incluso le donaban dinero.
Desde el incidente técnico, Qiao Biluo suspendió sus cuenta oficiales en las plataformas digitales. No obstante su historia se volvió tendencia en las redes sociales chinas con más de 600 millones de usuarios leyendo publicaciones bajo el hashtag «una vloguera es víctima de una falla que muestra su cara de anciana»
No es una novedad que los medios de comunicación en China están muy controlados y con la excepción de la cobertura de noticias de última hora, las imágenes en la televisión necesitan semanas de aprobación antes de poder ser transmitidas.
La mayoría de los usuarios chinos no pueden expresar sus opiniones porque podrían dar lugar a una fuerte reacción de las autoridades si el contenido se considera políticamente sensible o es en contra de la retórica del gobierno.