La ola criminal obligó a que las autoridades establecieran operativos, principalmente a Juárez y Cadereyta; sin embargo, esto de poco sirvió para la estadística, pues la cifra de muertes violentas se mantuvo.
Tan sólo en el mes de junio se contabilizaron en Nuevo León 74 homicidios dolosos, con lo que la cifra de muertes en el año se elevó hasta 468.
La intención de los operativos era reducir la cifra, pero hasta los primeros minutos de este miércoles 31 de julio, la cifra de ejecuciones es de 75, con una cifra total en el año de 543. Cabe destacar que el mes aún no concluye, por lo que dicha estadística pudiera aumentar.
Algunos de los casos que conmocionaron a la comunidad fue el de un agente ministerial que disparó su arma de cargo en su propio domicilio y le causó la muerte a su esposa.
También, el de una mujer que fue asesinada al interior del Penal del Topo Chico mientras realizaba una visita a un interno.
El 22 de julio fueron encontrados cuatro ejecutados en una zona despoblada de Cadereyta.
Cabe destacar que de los 75 muertos del mes en curso, 8 fueron en el municipio de Juárez y 10 en Cadereyta.
