Que continúan los problemas para Morena en Durango. Han pasado ya las elecciones pero los tiradores contra Morena continúan proliferando. Ahora se trata de la figura del superdelegado que está en juego y es que Durango sigue sumido en la incertidumbre en este aspecto. Todo ello, a pesar de que Enrique Ravelo, el designado superdelegado, quien se accidentó en su motocicleta, ya retornó a su casa y está recuperándose, dicen sus allegados.
Que, no obstante, levantan la mano para suplir a Ravelo Gustavo Pedro Cortés, actual superdelegado interino, también está Ignacio Aguado, quien cuenta con el apoyo de Tatiana Clouthier, Otniel García, quien a pesar de su desastroso resultado se siente digno de la encomienda e Iván Ramírez, un baluarte del morenismo en el estado.
Que Palmira Maldonado es la única mujer que quiere ese cargo y es apoyada por la senadora Margarita Valdés y en un escalón más abajo levantan la mano Héctor Vela, Pablo César Aguilar y Sandra Amaya. Está nutrida la caballada pues.
Que mientras se define todo en esa superdelegación los programas sociales siguen atorados, al gobernador José Rosas Aispuro le sigue cayendo el peso de la realidad, y la entidad se encuentra por debajo de la media nacional, en meta de creación de empleos, que es un 48%, contra un triste 28% estatal.
Y además en el término de un año pasó de estar entre los 5 estados menos corruptos del país, a estar en él deshonroso top ten de los estados con más corrupción administrativa. Le urge un cambio en su gabinete al gobernador, si quiere enderezar en algo las cosas, de cara a sus tres años finales de administración.
templete@milenio.com
