A mí me parece que cerrar el año futbolístico entregando los premios a lo mejor de las dos temporadas que lo componen, es un extraordinario ejercicio que merece ser perfeccionado empezando por lo incluyente.
El chiste para que esto adquiera una mayor credibilidad y aceptación es que todos quienes conforman el negocio futbolístico formen parte de ello y que no parezca la fiesta de una sola televisora o de un solo grupo de medios. Deben de reponerse al mismo tiempo una mayor cantidad de roles o posiciones dentro de la cancha.... defensores laterales, por ejemplo... preparadores físicos, directores deportivos... médicos también ¿por qué no?
Que no se vea que la ceremonia de premiación adquiera las veces de un show televisivo en el que deben incluirse cantantes o grupos musicales de moda y que nada puede alterar el ritmo que permite sumar en el campo del rating.
Ahora que se ha puesto de moda hacer transmisiones deportivas que mezclan comentaristas de varias televisoras no veo por qué no la próxima edición del Balón de Oro puede ser producida y transmitida por Univisión-Televisa, Telemundo, Televisión Azteca, ESPN, Fox Sports, Imagen y Multimedios... Por citar a las más importantes.
Lo mismo tendría que ser con lo que sucede al día siguiente, en lo que significa en la cancha el arranque formal del nuevo año futbolístico: los duelos por la Supercopa y el Campeón de Campeones.
Estoy seguro que no solo el concepto de inclusión estaría garantizado con este nuevo modelo. Me parece que la parte de negocio quedaría también mucho mejor parada con nuevos y mejores patrocinadores, con más público también. Los partidos que se jugaron ayer en Los Ángeles bien pudieron haber llenado un estadio con mayor capacidad que el de Los Ángeles Galaxy, al que le caben apenas unos 30 mil espectadores.
Es tiempo de crecer y esto solo se logra rompiendo modelos y esquemas. Entiendo que hay condiciones para ello.