El eje Prado-Retiro-Recoletos podría ser declarado Patrimonio de la Humanidad en el verano de 2020, en la categoría de Paisaje Cultural. El próximo otoño, expertos de la UNESCO visitarán Madrid para dictaminar si es viable la propuesta hecha en su día por el Ayuntamiento de la capital. Hay optimismo y se espera que este lugar emblemático de la ciudad, pueda sumarse a los 1.073 espacios que ya tienen esta distinción en 167 países. La superficie es de 190 hectáreas, de las cuales el 75 por ciento son espacios verdes. Aunque no se consiguiera el objetivo, el Ayuntamiento está dispuesto a «resucitar» el viejo Plan Especial del eje Prado-Recoletos, que se inició siendo alcalde Ruíz-Gallardón, y que finalmente fue aparcado por las graves discrepancias entre la Casa de la Villa y la Comunidad de Madrid, presidida entonces por Esperanza Aguirre.
Parece que hay coincidencia general en el Ayuntamiento para actuar sobre este espacio histórico-cultural, ordenarlo, protegerlo y convertirlo en una especie de pasillo del arte y la cultura, combatiendo el impacto medioambiental que soporta, de contaminación atmosférica y acústica, a consecuencia de la elevada densidad circulatoria. Conviene recordar que la primera idea tuvo un fuerte rechazo social, ya que contemplaba el enterramiento del tráfico y la tala de algunos árboles, con la anécdota protagonizada por Carmen Cervera, que amenazó con encadenarse al tronco de uno de ellos para impedir que se cortaran los situados frente al museo Thyssen.
«Paseo del Prado y Buen Retiro, Paisaje de las Artes y de las Ciencias», es la denominación dada por el Ayuntamiento a la solicitud para que este espacio sea declarado por la UNESCO, Patrimonio de la Humanidad, en la categoría de Espacio Natural. La propuesta municipal ha entrado oficialmente en la selección de los 25 proyectos que este año examinará este organismo internacional. Esta zona de Madrid, considerada como la joya del Madrid de Carlos III, tiene 300 años de vida histórica y cultural.
Los argumentos se antojan contundentes. En el área propuesta hay un importante número de espacios naturales, centros culturales y museos, entre ellos el Reina Sofía, Prado, Thyssen, Naval, Artes Decorativas o Antropología; el Jardín Botánico, todo el conjunto del parque del Retiro, además de Caixa Forum, las fuentes de Cibeles, Apolo y Neptuno, el obelisco a los Caídos, los monumentos en el interior del Retiro, y edificios tan notables como el Banco de España, Palacio de Cibeles, palacio de Buenavista, Congreso de los Diputados, los hoteles Palace y Ritz, la Bolsa, Academia Española de la Lengua, iglesia de los Jerónimos, Casón del Buen Retiro, la Casa de América (antiguo palacio de Linares) o la Biblioteca Nacional.
Madrid es una de las pocas capitales europeas, que no tiene un lugar como éste reconocido por la UNESCO. Ahora ha llegado el momento, porque la propuesta del espacio Prado-Retiro reúne todas las condiciones para que la declaración salga adelante. En otoño se espera la llegada del comisionado del máximo organismo internacional en esta materia, que tendrá que elaborar el informe definitivo. La decisión podría tomarse en el verano del próximo año. Manuela Carmena dijo que, si le gustaría repetir en el cargo de alcaldesa, cosa que no ha ocurrido, era por ver culminada esta aspiración. La declaración de Patrimonio de la Humanidad, supondría realizar fuertes inversiones, pero sería un atractivo turístico más, un reclamo para atraer más visitantes.