La Universidad de Valencia (UV) analizará si la dificultad del polémico examen de matemáticas de la Prueba de Acceso a la Universidad (PAU) del pasado junio en la Comunitat deja a alumnos valencianos fuera de algunas titulaciones a las que sí accedan estudiantes de otras autonomías que han visto facilitadas sus notas al tener exámenes con menos dificultad.
Así lo aseguró ayer la rectora de la UV, Mavi Mestre, durante los Desayunos de la Agencia Efe en el Colegio de Abogados de Valencia, donde señaló que considera que es el momento de abrir el debate sobre esta prueba para acceder a la universidad.
En este sentido, indicó que este año el examen de matemáticas «sí que ha sido un problema» en la Comunitat, donde la nota media ha sido de un 4,5, el resultado más bajo de los últimos diez años. Hay que remontarse a 2010 para encontrar un 4,96, mientras que la media desde 2010 es de 5,89. «El resultado de este año se debió a su dificultad y/o longitud del propio examen».
Ante esta situación, afirmó que con las notas de corte y los números clausus podrán ver cuántos estudiantes de otras comunidades acceden a las titulaciones del centro universitario y y si de los estudiantes valencianos queda más gente fuera respecto a cursos anteriores.
En este sentido, apuntó que los estudiantes de otras autonomías con notas más altas acceden normalmente a titulaciones de su comunidad, como en el caso de Medicina, que tiene una alta demanda. Sin embargo, puede que esta corriente cambie este año. «Siempre los buenos expedientes de otras autonomías acceden a su comunidad y no vienen aquí. Vamos a ver este año qué pasa», declaró la rectora para añadir que espera que «sea así, porque si no efectivamente nuestros estudiantes se verían perjudicados».
Según Mestre, tras analizar los resultados, «habrá que abrir un debate a nivel de Conselleria y de Comunidades Autónomas, sobre el acceso a la universidad» y valorar si hay que hacer «alguna prueba específica para algunas titulaciones propias de cada universidad. Hay que estudiarlo bien porque está en juego totalmente el futuro de los universitarios».
