La cita con la moda, ya en Ifema, tuvo ayer dos protagonistas. Por un lado, la fallecida Cuca Solana, a la que se rindió tributo con la proyección de un vídeo a la que fue la gran impulsora de la pasarela española, MBFWMadrid. Y, por otro, los desfiles de El Ego. Alaska Accesorios presentó la propuesta más innovadora y tecnológica. Su colección «Deconstructive Heads» está enfocada al diseño y desarrollo de «accesorios para la cabeza». Redenominados como «objetos portátiles», la firma ofrece una excusa perfecta para coronar la testa con una pieza original que puede ser única y se identifica con su usuario interactuando con él utilizando como nexo de comunicación los dispositivos móviles. Unas estructuras que se pueden construir y deconstruir a través de módulos y que hacen resurgir el arte de la sombrerería de Phillip Tracy. Los materiales que emplea la marca son filamentos de impresión flexible y telas técnicas, así como fibra óptica bordada a mano.
Dos firmas se unieron ayer en un intento de internacionalizar la pasarela. La californiana VeniceW que apuesta por una moda en la que la arruga y la tela rasgada son las protagonistas. La marca realiza prendas en papel y luego las replica en lino. Muy originales sus calentadores cilíndricos de encaje y los bolsos «llorona» con kleenex incorporados. «Provocación» es el término que mejor define a Di Petsa, segunda firma extranjera. La marca utiliza un tejido de diseño único, semitransparente y evocador de la tela mojada. La radical diseñadora griega explora el concepto de humedad femenina mirando de cerca la relación de la mujer con el agua y la desnudez. Una colección «de aspecto mojado» en la que hay sostenes blancos que cubren los senos con delicadeza que parecen haber sido empapados durante un baño en el mar, pantalones de mezclilla con lo que simula manchas de orina alrededor de la entrepierna y la pierna, y una camiseta muy sugerente con una gota de agua en un pezón. Un intento de burlar la censura del cuerpo femenino por parte del patriarcado y el efecto de goteo que esto tiene sobre las propias mujeres y su actitud hacia sus fluidos corporales: sangre de periodo, sudor y leche materna.
La de Becomely es una colección fresca que convierte lo inocente en sexy y lo sexy en un juego de niños. Todos sus productos son de fabricación española y sus complementos producidos mediante impresión 3D a partir de materiales orgánicos y sostenibles de origen vegetal. Maxivestidos y mangas abullonadas en tonos pastel y tejidos que esconden sofisticación y fantasía.
Por último, color y acabados serigrafiados definen la colección «MNMLSM» de Inkrush, mientras que las prendas de Coconutscankill son siluetas que respetan el cuerpo con materiales como puntos de algodón, denim y tules fluorescentes. Patrones sencillos pero deconstruidos, una tendencia en El Ego.
