Nikola Mirotic ha pasado del Madrid al Barcelona tras un lustro en la NBA. El canterano blanco estuvo ocho temporadas en el Madrid y dentro de dos meses y medio se estrenará con la camiseta azulgrana en partido oficial. Será el 21 de septiembre en el WiZink Center. La cancha donde jugó tantos encuentros de blanco y que acogerá la Supercopa, con la presencia además del Madrid y del Barça, del Valencia y del Fuenlabrada. Los emparejamientos están por definir, pero los blancos (campeones de Liga) y los azulgrana (de Copa) serán cabezas de serie y no podrán enfrentarse hasta la final, que se disputará el 22 de septiembre, justo una semana después de que termine el Mundial (donde la presencia de Mirotic está en el aire). Podría ser entonces su primer Clásico con la camiseta cambiada y ya con un título en juego.
Los aficionados madridistas mostraron ayer en las redes sociales su decepción con el internacional por la decisión de fichar por el gran rival y algunos reflejaron en las redes sociales que el jugador borró varios mensajes antiguos en los que mostraba su apoyo al Madrid. Su pasado está ahí, el futuro lo veremos a partir de septiembre. La Supercopa vendrá fuerte.
