En la noche del miércoles el Partido Demócrata inició la ronda de debates entre sus precandidatos de cara a las elecciones de 2020. Este año el partido de la oposición superó la cantidad de participantes que había presentado el Partido Republicano en las elecciones pasadas con 17 precandidatos y son 20 demócratas los que buscan […]
En la noche del miércoles el Partido Demócrata inició la ronda de debates entre sus precandidatos de cara a las elecciones de 2020. Este año el partido de la oposición superó la cantidad de participantes que había presentado el Partido Republicano en las elecciones pasadas con 17 precandidatos y son 20 demócratas los que buscan medirse ante Donalad Trump.
El hecho de que sean tantos precandidato llevó a que los debates se dividieran en dos noches en Miami.
En la primera oportunidad los estadounidenses escucharon a diez senadores, representantes y funcionarios —un gobernador y dos alcaldes entre ellos— que buscan llegar a la Casa Blanca.
Los principales candidatos de la primera noche fueron: Cory Booker (50 años), Elizabeth Warren (70 años), Beto O’Rourke (46 años) y Amy Klobuchar (59 años).
Warren, senadora por Massachusetts, es una de las que lidera el corrimiento del Partido Demócrata más a la izquierda y presentó su candidatura a finales del año pasado. De ante mano ya era la favorita para el debate de ayer entre sus competidores.
Entre sus principales ejes de campaña figuran equilibrar la desigualdad salarial, combatir la corrupción política y empresarial y reducir la deuda que contraen los estudiantes para poder pagar su formación superior.
En su intervención habló sobre la economía estadounidense, y sobre las cifras que marcan que un gran porcentaje considera que “va bien”.
Our health care system is working great for companies making massive profits, but not for families who can't afford health care. #DemDebate pic.twitter.com/URsaEn59C4
— Team Warren (@TeamWarren) 27 de junio de 2019
“La economía marcha bien para los que tienen dinero, pero no para todos los demás”, expresó.
Habló de los más ricos en la cima de la pirámide, de las empresas farmacológicas, de los administradores de cárceles privadas y los comparó con el ciudadano común que sufre por sus operaciones.
Uno de los temas centrales de campaña para el partido demócrata es el problema migratorio, un tema que también trató la senadora de Massachusetts que incluso antes de llegar al debate fue a visitar un centro de detención de menores indocumentados en Homestead, Miami.
“Lo que está sucediendo a causa del gobierno de Estados Unidos es intolerable, está manchando a nuestro país y tenemos que denunciarlo”, dijo en ese contexto.
Este jueves se realizará la segunda edición del debate con los pesos pesados del Partido Demócrata para aspirar a la Casa Blanca: el exvicepresidente Joe Biden, líder en las encuestas demócratas y el socialista Bernie Sanders.