Fue la tarde del 18 de marzo cuando un toro le cogió y le estampó sobre la arena en la Feria de Fallas de Valencia. Impactante fue su manera de caer, retorciéndose su rodilla izquierda, la que horas más tarde y una vez intervenido, el propio Doctor Villamor, de la clínica Iqtra de Madrid definiría como una lesión de «rodilla catastrófica». Paraba en seco y a principio de temporada su campaña 2019. O eso creímos. A última hora, y a contrarreloj, El Juli le sustituyó antes de que se dieran a conocer los carteles de San Isidro, donde se anunciaba dos tarde y donde había entrado en la feria accediendo al invento del empresario francés Simón Casas del sorteo. A pesar del bombo, Enrique Ponce se quedó fuera de Madrid, aunque justo aquella tarde en la que hubiera tenido que hacer el paseíllo le vimos en la Monumental de Las Ventas, en uno de los sillones que están encima de toriles y acompañando al rey Emérito, pocos días antes de que se hiciera oficial su retirada de la vida pública.
Apenas cuatro meses después, Enrique Ponce, junto al doctor Villamor, que fue quien le intervino y quien se ha hecho cargo de todo el proceso de recuperación, darán una rueda de prensa. Será mañana en Madrid con el fin de confirmar la vuelta a los ruedos del diestro madrileño que parece ser será en el mes de agosto. Cinco meses después de la grave lesión. A todas luces, tiempo récord.