José Rosas Aispuro y Miguel Riquelme, gobernadores de Durango y Coahuila respectivamente, se reunieron hace unos días y el tema principal que trataron fue el de la cancelación del proyecto del Metrobús.
Ambos mandatarios también hablaron de lo realizado por Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México, quien con sus encuestas a “mano alzada”, tomó la decisión de cancelar una obra que todavía no ha comenzado.
Ahora, Tanto Riquelme Solís como Aispuro Torres, saben que tienen que cerrar filas, estar unidos, ya que en cualquier visita que lleve a cabo López Obrador, tanto a Coahuila como a Durango, con la mano en la cintura o mejor dicho, levantada, puede echar abajo cualquier obra o proyecto, sin importar que ya esté empezada y se puedan perder millones de pesos.
Saben ambos mandatarios que a los laguneros en general no les gustó la cancelación del proyecto del Metrobús, como tampoco la forma en que actuó el Presidente de México, por lo cual ambos tomaron la decisión de ir en un mismo rumbo, buscando que esta obra tan necesaria para la región, pueda seguir adelante.
José Rosas Aispuro, estuvo de visita en La Laguna de Durango, en donde comentó que este martes habrá de acudir junto con Miguel Riquelme, a la Ciudad de México para abordar tres temas, el del Metrobús, el del agua y los recursos del Fondo Metro.
Saben los dos gobernadores que tienen que luchar por sus objetivos, por lo que buscarán que se autorice por parte del gobierno federal este importante proyecto que impulsará a la región lagunera.
En estos momentos, sabe el Presidente de México que sus bonos van en caída libre, que hay muchas voces que no aceptan su forma de dirigir al país, que el 30 de junio se realizará otra marcha en su contra, aunado a los problemas económicos que se tienen, por sus decisiones al vapor.
Ahora, no tendrá más remedio que cambiar su forma de trabajar, para darle certidumbre a los empresarios, que son quienes mueven la economía en todo el territorio nacional, así como a los millones de mexicanos que confiaron en él.
No cabe duda que hay descontento contra López Obrador y para calmar las aguas, algo tiene que hacer y rápido.
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