Alistair Brownlee ya está en el Road to Kona de pleno derecho. En el camino ha tenido que superar a una carta, el infierno irlandés de Cork, 14 ºC de temperatura y lloviendo desde la salida a la meta.
En estas condiciones Alistair perdía su primera bala, la natación, que supuestamente le iba a dejar en cabeza con una minutada sobre los ciclistas. A modo de CRI se iniciaba la prueba, fue entonces cuando Alistair utilizó una táctica distinta a lo esperado por la mayoría, totalmente opuesta.
El británico, salió a reservar en bici, para correr lo más rápido posible, llegaba con una preparación mixta WTS / IRONMAN con lo que no sabía cual sería la reacción de su cuerpo en esa distancia. Esa táctica le salió bien pues aun conservando, los 10 km finales lo pasó mal.
“ Me divertí mucho en los primeros 30 km de carrera, pero los 10 km finales no fueron divertidos para nada “
Con todo los datos son los siguientes, Alistair perdió en el segmento ciclista 17 minutos, sobre Bryan McCrystal, un hombre que en 2016 corriendo como GE en Kona marcó en solitario 4:29:30 el mismo tiempo que el vencedor aquel año Jan Frodeno. Después Brownlee corrió en 2:51:31 que en ese circuito y con la lluvia no está nada mal.
Ahora queda ver que hace o como prepara Kona, con casi 4 meses de preparación, habrá que ver si corre el simulacro de Tokyo el 15 de agosto y después tendría dos meses para preparar el Mundial de IRONMAN al 100%, tiempo de sobra para llegar con opciones de ganar.
En Kona, con una natación si o si en cabeza, hay que ver si juega la baza de ir en el grupo delantero, o la de su amigo David McNamee, a su ritmo y no petar a pie.
Me dacanto por la primera, ir en el grupo y hasta donde llegue. El tiempo dirá que sucede.
FOTO: IRONMAN