El Instituto Nacional de Migración dispone de 2 mil millones de pesos para brindar atención a la población migrante procedente de Centroamérica, informó el titular Francisco Garduño.
El presupuesto se reforzará con los recursos que se obtengan de la venta del avión presidencial y con el dinero del Fondo Yucatán, que representan alrededor de 2 mil 500 millones de pesos.
El INM coordinará con Protección Civil la instalación de los albergues para ofrecer espacio y alimentos: “Habrá comida para los migrantes que ahí esperen”, dijo en entrevista con MILENIO.
Francisco Garduño aseguró que la misión más importante es contener la migración en la frontera sur, pero que esta seguirá a pesar de las amenazas del gobierno estadunidense: “independientemente de las amenazas de Estados Unidos, la migración va a continuar, porque la frontera sur de México, es una frontera virtual, solo divide el agua a los dos países”.
Garduño aseguró que alrededor de 2 mil personas de origen hondureño esperan en México su repatriación, mientras que los que permanezcan en el país hasta la resolución de su proceso migratorio en Estados Unidos pueden permanecer en Reynosa.
El funcionario reconoció que la migración en la frontera sur creció y que ahora es una bandera nacional en Estados Unidos.
OVM
