Marcos Llorente ya es jugador del Atlético de Madrid porque él tenía muchas ganas de irse al conjunto rojiblanco y porque al final los dos clubes han llegado a un acuerdo. Su padre Paco Llorente ya estuvo en el conjunto rojiblanco y ahora Marcos va a vestir también las dos camisetas, pese a que como se ve en el vídeo alguna vez proclamó su madridismo por encima de todo. “Yo de blanco siempre”, dijo cuando en un chat en el periódico Marca le preguntaron si cambiaría de camiseta. Pero no ha podido ser. Dos veces lo ha intentado, sin suerte o sin poder demostrar todo lo que parecía que iba a ser en los filiales. En la cantera siempre se le veía como uno de los futbolistas más destacados, con un dominio absoluto del centro del campo. Pero en el primer equipo, al principio, le pesó la responsabilidad y después, cuando empezó a jugar con Solari, tuvo la lesión más inoportuna.