México mantuvo estable la entrada de flujos de Inversión Extranjera Directa (IED) durante 2018, con un ligero descenso de 1.5 por ciento a 31 mil 604 millones de dólares, según dio a conocer este miércoles el Informe sobre las Inversiones en el Mundo 2019 de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD).
Esto se contrasta con la caída del 6 por ciento que mostró América Latina y el Caribe, como muestra de menor atractivo para la inversión foránea.
El aumento de las ganancias reinvertidas de las filiales extranjeras existentes en México durante el último año de la administración del presidente Enrique Peña Nieto, ayudó a que la inversión total hacia el territorio mexicano se mantuviera casi estable, lo que representó el 21.5 por ciento del total de flujos dirigidos a América Latina y el Caribe.
“Se espera que los flujos de inversión hacia y desde la región se mantengan estables en 2019, a medida que se estabilicen los precios de los productos básicos y las condiciones económicas en las principales economías”, señaló en el reporte presentado en Ginebra, Suiza.
Sin embargo, los flujos de IED hacia México y la región podrían estar en riesgo ante las tensiones comerciales entre sus principales socios comerciales, señaló la conferencia.
“Las tensiones comerciales entre sus principales socios comerciales y una desaceleración económica mundial, plantean un riesgo significativo para las exportaciones de productos básicos de la región, lo que podría afectar las perspectivas de IED", dijo James Zhan, director de la División de la Inversión y la Empresa de la UNCTAD.
Pese a ello, Zhan destacó una perspectiva actual de estabilidad.
“En la prospectiva para América, vemos numerosos factores positivos para atraer a los inversores. Los recursos naturales, la infraestructura y los bienes de consumo deberían seguir atrayéndolos”, precisó.
Sobre este tema, la Secretaría de Economía publicó a finales de febrero el informe sobre la inversión extranjera directa del año pasado, en el que dio a conocer que fue de 31 mil 604.3 millones de dólares. "Esta cifra es 6.4 por ciento mayor a la cifra preliminar del mismo periodo de 2017", afirmó en el documento.
Entre los países de América Latina y el Caribe, Panamá destacó por el dinamismo en la atracción de IED durante 2018 con un incremento de 21 por ciento a 5 mil 500 millones de dólares, impulsadas por un nivel sin precedentes de fusiones y adquisiciones y proyectos mineros.
Mientras que los flujos de IED se mantuvieron estables en Centroamérica, en Brasil y Colombia hubo una contracción significativa.
La difícil situación económica del país carioca y una abrupta reducción de las fusiones y adquisiciones en comparación con los niveles sin precedentes de 2017 se tradujeron en una caída del 9 por ciento de las entradas de inversión al país, a 61 mil millones de dólares.
En Colombia, los flujos descendieron 20 por ciento a 11 mil millones de dólares.
En el resto de América del Sur, las entradas se mantuvieron constantes, y en Ecuador se duplicaron gracias a un brusco aumento de la inversión en el sector minero.
