La nueva colección crucero 2020 de Carolina Herrera inspirada en "un amanecer en Tulum, la luz de Lima, un paseo por la ciudad de México (...) o lo colores de Cartagena" ha generado molestias en el Gobierno de México, que acusa a su diseñador, Wes Gordon, de apropiación cultural.
"Se trata de un principio de consideración ética que nos obliga a hacer un llamado de atención y poner en la mesa de desarrollo sostenible de la ONU un tema impostergable”
La secretaria de Cultura, Alejandra Frausto, solicita en una carta dirigida a Carolina Herrera y al director creativo de la firma, Wes Gordon, "una explicación por el uso de diseños y bordados de pueblos originarios".
En esa misiva,
"La nueva colección crucero 2020 de Carolina Herrera se inspira en unas alegres y coloridas vacaciones latinas, el amanecer de Tulum, las olas en José Ignacio, el bailar en Buenos Aires o los colores de Cartagena", según explica la nota de prensa de la firma, perteneciente al grupo Puig, con el que se ha contactado sin recibir ninguna reacción a esta reclamación.
, más cuando está trabajando en una iniciativa de ley que proteja su arte y creatividad para evitar el plagio.
Pueblos y comunidades de México serán los titulares del derecho para el uso y aprovechamiento de sus elementos culturales.
— Secretaría Cultura (@cultura_mx) 12 de junio de 2019
Alistan la primera iniciativa de ley para proteger la creatividad de artesanos y detener el plagio del arte popular.
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Uno de los modelos cuestionados es un vestido blanco largo con vistosos bordados de animales y flores y Frausto señala en esa carta que "ese bordado proviene de la comunidad de Tenango de Doria (Hidalgo); en estos bordados se encuentra la historia misma de la comunidad y cada elemento tiene un significado personal, familiar y comunitario”.
Otros son unos vestidos por encima de la rodilla con vistosas flores bordadas como las que se hacen en la región del istmo de Tehuantepec, en Oaxaca.
Y un tercer caso, en el que
"Se trata de un principio de consideración ética que nos obliga a hacer un llamado de atención y poner en la mesa de desarrollo sostenible de la ONU un tema impostergable: promover la inclusión y hacer visibles a los invisibles”, termina diciendo la carta.
Tras 37 años en el mundo de la moda y 72 desfiles, , encargado de crear esta última colección Crucero 2020 que ha generado molestias al gobierno mexicano.
Pero el de Carolina Herrera no es el único caso que el Gobierno mexicano ha considerado un plagio. Zara, Mango, Isabel Marant, Louis Vuitton y Michael Kors, Santa Marguerite o Etoile han sido algunas de las firmas que han recibido anteriormente una llamada de atención desde México, que desde el pasado mes de noviembre trabaja en una ley que salvaguarde la cultura indígena.
Hasta ahora, Basta recordar las colecciones de Moschino, Gaultier o Lacroix que han creado por ejemplo a partir de la estética de la tauromaquia. Lo que antes parecía inspiración hoy podría considerarse plagio.
AC