El obispo Julio Cesar Salcedo reveló que en Tlaxcala han sido separados de la Iglesia católica dos sacerdotes por abuso sexual a menores de edad y que fueron comprobables los señalamientos en su contra.
El jerarca manifestó que desde su llegada a Tlaxcala, solo tiene conocimiento de dos casos, aunque dijo no recordar en qué municipios se presentaron: “Cuando llegué al estado fui informado de la situación, pero con precisión no sabría decir en que regiones o en que parroquias se dieron estos hechos”.
Comentó que la Iglesia católica ya cuenta con protocolos para evitar que se repitan más casos, de entrada, dijo, esto empieza desde la formación en los seminarios; revisar el perfil de los jóvenes que ingresan, porque en ocasiones llegan con cuestiones familiares, de su entorno o personales que repercute en su persona.
“Hoy estamos al pendiente de estas situaciones, desde el seminaria se trabaja con exámenes para revisar el perfil psicológico, ahí se conoce que formación tienen desde el seno familiar, ¿qué ha vivido en su entorno?, ¿qué es lo que obliga al joven a llegar al seminario?, pero, sobre todo, se analiza la disposición de servir al prójimo y no afectarlo”.
Salcedo sostuvo que como parte de estos protocolos, si se detecta a un sacerdote que ha incurrido en una mala práctica, como el abuso a menores, de inmediato es reportado y separado de sus funciones para a una investigación, “porque no siempre son situaciones verdaderas, por tanto se indaga antes de tomar una medida”.
En cuanto a los dos casos en Tlaxcala, dijo desconocer si existe una sanción legal; no obstante, fueron dados de baja de la Iglesia y puestos a disposición de la Conferencia Episcopal.
Aseguró que no habrá más encubrimientos de sacerdotes que cometan esas prácticas, como lo advirtió el papa Francisco, luego de los abusos contra menores cometidos por eclesiásticos.