Edith Ramos Bravo estudió psicología, pero su pasión siempre fueron los bordados y la confección de ropa, por lo que decidió cambiar de rumbo e iniciar por el trabajo de redignificar la labor de muchas mujeres en el país dedicadas al bordado de prendas artesanales.
La tarde de este sábado mostró una parte de su trabajo durante la pasarela que se realizó con motivo del Mami Fest 2019 que organizó el municipio de Pachuca para celebrar el Día de las Madres.
"Mi marca ofrece propuesta para que encuentres un outfit para irte a trabajar, para una fiesta, una cena y hasta para una gala y que vayas bien vestida porque estos diseños mexicanos no le piden nada a las marcas extranjeras".
"Hago bordados de toda la república y estoy muy orgullosa de lo nuestro, por lo que realizo bordados de la Huasteca, tenangos, de la Otomí-Tepehua, de todos lados", señaló Ramos Bravo.
Psicóloga de profesión, Edith realizó sus estudios alternos para llevar a cabo su empresa de diseño de ropa y bordados, debido a que el amor por este trabajo lo adquirió desde pequeña.
"Desde que tuve la oportunidad de pagarme mi carrera de diseño, después de estudiar psicología, realicé ese gusto que llevaba por dentro de mí porque mi mamá es de la Sierra de Oaxaca y entonces desde niña tuve ese gusto por lo artesanal".
"Estuve acostumbrada siempre a estar en contacto con esa riqueza, por eso sé de todos los bordados de la república y me puse a estudiar qué hay detrás de cada bordado para mantener el respeto por el significado del trabajo realizado", expresó.
Entre los modelos que mostró a las más de 150 personas que se ubicaban en la explanada de la Plaza Independencia, presentó vestidos con tenango, mismo al que le invirtió 60 horas de trabajo, un vestido de popelina rojo con bordados del Estado de México al cual invirtió 80 horas, así como blusones de la Huasteca Hidalguense, huipiles y blusas, diseños con bordados tradicionales de Hidalgo, Puebla, Tlaxcala y Chiapas.
"Hay una gran importancia en cada bordado y es increíble ver marcas internacionales que le ponen más atención que nosotros como mexicanos, por lo que es importante rescatar toda la importancia cultural de nuestros bordados".
"A veces la gente no tiene idea de lo que significa, del tiempo que se le invierte, de la historia y significado que tiene, saber lo que cuesta hacerlo y producirlo", indicó.
En este momento tiene una prenda que registró para participar en el concurso artesanal que se realiza en Hidalgo, y espera tener ese reconocimiento para fortalecer más la marca que dignifica la labor de las bordadoras mexicanas.