Lo que más se canta y se baila en la Feria son las sevillanas aunque hay mucha rumba e incluso otras melodías, ritmos latinos y hasta reguetón o los temas más vendidos y los números uno en ventas. Las sevillanas, que experimentaron un boom hace ya varias décadas, cuando varios grupos dieron el salto de Despeñaperros e incluso se abrieron salas rocieras en Madrid, están ahora atravesando otra vez un buen momento.
Así lo confirman fuentes de la compañías discográficas, cantantes del sector e incluso grupos de los que se dedican a hacer «bolos» por las casetas durante toda la semana. «Hace unos años sólo estaban en el Rocío, en la Feria o en el final de las bodas, pero ahora hay una gran demanda», dice Lola Triana de Adriático Records, una compañía discográfica que está comprobando ese nuevo resurgir de este estilo musical. Hay todo un catálogo de nuevos discos que se editan cada año y que están haciendo que estos cantes «recobren su sitio».
Cada primavera se vuelven a editar discos y a los clásicos de siempre, Los Romeros de la Puebla y Los Amigos de Gines, (que llevan cincuenta años en el mercado) y otros grupos legendarios, se unen otros discos que siguen editándose. Las Carlotas, María de la Colina, Brumas, Los del Guadalquivir... y un sinfín de grupos se escuchan cada vez más.
En esa vuelta a la esencia de la fiesta tiene también algo que ver el gran auge del programa de Canal Sur Televisión «Yo soy del sur» que ya lleva tres ediciones y que ha contribuido a difundir las sevillanas. «Están saliendo muchas sevillanas nuevas», dicen fuentes de ese programa con una gran audiencia. Y lo mismo ocurre con otras radios especializadas en este género. O el espectáculo que organiza al inicio de la Feria bajo la portada el Ayuntamiento de Sevilla.
Normativa de música
«La sevillana se mantiene viva y hay muchos grupos que la siguen defendiendo», sostiene Rafa Almarcha, líder de Siempre Así. Aunque el conjunto que él lidera es especialista en rumba, Almarcha asegura que hay que fomentar las sevillanas y defenderlas. «Debería haber una normativa en la Feria de Sevilla para que en las casetas sólo se pusiera música nuestra», dice Almarcha.
En cualquier caso, en esa normativa también podría entrar la rumba, uno de lo bailes que se ha extendido también en la Feria de Sevilla. Sobre todo en las casetas particulares que contratan grupos musicales y que, gran parte de su actuación la dedican a cantar rumbas. Algo a lo que contribuye el hecho de que, como dicen algunos, «la rumba se puede bailar sin saber mientras que de las sevillanas hay que saberse los pasos».
Uno de los factores que influye en elegir una u otra música es la edad. A los mas mayores les gustan más las sevillanas y a medida que se baja de edad los gustos musicales cambian. Antonio Urbano, uno de los integrantes del grupo «La Tomasa» que lleva más de diez años cantando en casetas de Feria divide al público por edades. Los de 60 para arriba le piden todo el rato sevillanas y quieren los temas clásicos, los de siempre. «En un pase de 45 minutos sólo quieren una rumba; el resto del tiempo prefieren sevillanas». Y no es raro ver a niñas pequeñas bailando con sus madres y abuelas. Eso ocurre más por las tardes.
El anillo pa cuando
Luego están los de media edad, de entre 35 y 60 años. Esos, según el cantante, quieren muchas rumbas, de las de siempre, temas de José Manuel Soto, Siempre Así, Rafa Serna... a medida que va cayendo la noche. Y luego están lo que tienen menos edad. esos quieren otros temas: canciones latinas, versiones de Jennifer López, de Enrique Iglesias. Sobre todo de madrugada.
De hecho, escuchar reguetón en las casetas tampoco es raro. Es un fenómeno que va a más en casetas públicas o en las de clubs y asociaciones. Sobre todo por las noches cuando el público es más joven. A esas horas en el real puede escucharse desde «el anillo pa cuando» hasta «Despacito». Las hay que tienen hasta disjey para pinchar música disco. Y otros que lo hacen con youtube.
La evolución de las letras
Las sevillanas, igual que la moda han ido cambiando. Sobre todo las letras. Aunque el Rocío, el amor y Sevilla son temas recurrentes, el paso de los años también se ha notado. Desde las «corraleras» a las letras costumbristas, los caballos y los toros o incluso las sevillanas «picantes», la evolución se ha notado. Desde hace unos años la temática social o incluso los malos tratos también tienen hueco en las letras de algunos artistas. «Que un hombre tiene que ser/ Buen compañero y marido/Y vestirse por los pies/De qué estará hecho un tío/Que le pega a une mujer». Así cantaban unas de sevillana contra la violencia de género.
