La Asociación del Defensor del Paciente ha solicitado a la Fiscalía del País Vasco que investigue la muerte de un hombre de 39 años, natural de Cantabria, que murió tras ser anestesiado para someterse a un trasplante capilar en una clínica privada de Bilbao.
En un escrito dirigido a la Fiscal Superior del País Vasco, al que ha tenido acceso Europa Press, la asociación pide una investigación de oficio por la muerte de este hombre cuando le iban a realizar una intervención de implante de pelo.
La asociación pide que se investiguen los hechos por si hubiera podido producirse una "presunta negligencia" debido a la "cantidad de anestesia" o por "falta de control en el preoperatorio".
Según dice, esta intervención estética de implante de pelo "la venden casi como inocua" cuando podría existir "una publicidad engañosa" y "sin explicar los efectos adversos graves que pueden suceder", señala la asociación.
Según ha publicado este viernes 'El Diario Montañés', el hombre, natural de Maliaño, acudió el pasado viernes a la clínica de la capital vizcaína para someterse al trasplante capilar, pero al recibir la anestesia dermatológica local entró en parada cardiaca.
En un primer momento pudo ser reanimado por personal de la propia clínica, que avisó al 112, y fue trasladado en ambulancia al hospital público de Basurto.
Una vez allí, se decidió derivarle al Hospital Valdecilla de Santander para recibir tratamiento de la cámara hiperbática. Finalmente, se registró su defunción el sábado en dicho centro hospitalario.
