Días pasados la Asociación de Obreros y Empleados de CONAPROLE adoptó una serie de medidas sindicales en protesta porque consideran que la empresa “no cumple con los convenios firmados en setiembre de 2018”.
Por su parte, CONAPROLE cuestionó las “diversas medidas gremiales distorsivas”, y denunció que fueron tomadas “en clara violación de la cláusula de paz firmada en el ámbito del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social el 7 de setiembre de 2018”.
La situación afectó la distribución de algunos subproductos lácteos.
En ese marco, el ministro de Trabajo, Ernesto Murro, presentó a trabajadores y empresarios una propuesta para destrabar el conflicto, la cual fue aceptada por las partes.
A través de la propuesta se establece un “plan de negociaciones” con un plazo que finalizará el 15 de julio, y que podrá ser prorrogado por 30 días más en caso de que el Ministerio de Trabajo considere que se avanzó en las negociaciones, pero que no se ha concluido, es decir se habilita la extensión si hay acuerdo entre las partes.
A la vez, se plantea el compromiso de los trabajadores y de la empresa de no innovar ni adoptar medidas sindicales.
“Es un buen acuerdo en un tema que está siendo trabajoso, pero se está tratando de hacer gestiones para seguir mejorando las relaciones laborales en una empresa con buen crecimiento y desarrollo, como lo es CONAPROLE”, remarcó Murro.
El secretario de Estado manifestó que el objetivo es “lograr que la compañía continúe desarrollándose en beneficio de los trabajadores, la cadena láctea, los productores y el país”.
