Ni una sola vez aparece la palabra Constitución en el manual de resistencia de cuarenta y tantos folios que Pedro Sánchez grapó y repartió ayer como programa electoral del PSOE. Total, para qué. La cosa está tranquila y hay otras urgencias nacionales, como la memoria histórica –ahora «memoria democrática de futuro»–, la «concienciación y formación de la ciudadanía», el dentista gratis, la identidad de género o el bienestar animal. Las dos únicas referencias a la Carta Magna son derivaciones del término original y aparecen junto a la palabra «reforma». Negro sobre blanco, las prioridades de Sánchez pasan por el «reconocimiento de la singularidad y las opciones políticas propias de cada comunidad autónoma» antes que por la vindicación del texto... Ver Más
