El consejero de Educación, Fernando Rey, reivindica la dimensión internacional del sistema educativo de Castilla y León así como la calidad de los docentes y de las universidades.
«Una Educación no puede ser sólida, creíble e importante si no tiene detrás una repercusión en el mundo», aseguraba ayer el consejero al presentar un nuevo proyecto de hermanamiento en el norte de África, esta vez con la República de Argelia, que se suma al que ya está en marcha con gran acogida en Marruecos.
Objetivo: proporcionar al país argelino, muy vinculado a España por la exportación energética, una Educación Superior de Calidad que pueda contribuir al desarrollo de su economía y al bienestar de sus ciudadanos, y especialmente ahora que Argelia vive momentos sociales y políticos convulsos contra su actual dirigente, Abdelaziz Buteflika.
Por otra parte, Rey aprovechaba este acto para calificar de «impresentable» que España, como Estado, no coordine estos proyectos europeos. «Estoy a favor de la descentralización por la defensa de los derechos sociales de las personas, pero es un contrasentido que las Comunidades Autónomas tengan que competir contra Estados», denunciaba el consejero. Castilla y León ha tenido que pelear contra un país como Francia para llevarse este proyecto de Argelia, y hace unos meses compitió otra vez contra Francia, Croacia y Letonia, aunque sin éxito, para otro en Bosnia Herzegovina que pretendía mejorar la movilidad laboral de estudiantes y profesorado
El proyecto de Argelia cuenta con un presupuesto de 1,6 millones de euros, tendrá una duración de 30 meses a partir de abril y supondrá el traslado de profesores universitarios de la Comunidad a Argelia para adaptar su sistema al Espacio Europeo de Educación Superior, que marcó el Proceso de Bolonia.
La Universidad de Valladolid llevará el peso de la iniciativa con Antonio Bueno, profesor de la Facultad de Traducción e Interpretación del Campus de Soria, a la cabeza.
