El popular Francisco Salado ha sido investido presidente de la Diputación de Málaga con los 17 votos del PP y de Ciudadanos y después de la renuncia de Elías Bendodo tras ser nombrado consejero de Presidencia, Administración Pública e Interior de la Junta de Andalucía el pasado 22 de enero.
En su primera intervención como presidente de la institución, Salado, que ha jurado el cargo, se ha mostrado muy emocionado y agradecido a su familia y a Bendodo, "compañero y amigo", al que ha alabado su "ambición sana por la provincia, su espíritu emprendedor, su determinación y su inconformismo".
Tras enumerar las iniciativas desarrolladas y los proyectos en marcha o que se prevén acometer, se ha comprometido a mantener "viva esa ambición y lucha por los intereses de Málaga" y, como prioridad, "mejorar la coordinación con la Junta en materia social", confiando en que las puertas que estos años han encontrado "cerradas" ahora se abran. En la votación, Salado ha obtenido 15 votos del PP y dos de Ciudadanos. El resto de portavoces, Francisco Conejo (PSOE), Teresa Sánchez (IU) y Rosa Galindo (Málaga Ahora) también han optado a la Presidencia.
