Durante 2018 la Contraloría del gobierno estatal recibió a través de sus diversos sistemas y aplicaciones.
De ellas, en promedio solo 10 por ciento llegó a un procedimiento administrativo ante posibles faltas cometidas por los servidores públicos, reconoció el titular del área, Javier Vargas Zempoaltecatl.
En entrevista con MILENIO Estado de México aclara que 90 por ciento no termina en el archivo ni lo desechan pues varias quejas corresponden al ámbito federal, otros poderes o niveles de gobierno, donde la dependencia resulta incompetente.
Lo más señalados sigue siendo los vinculado con el sector justicia, educación y salud, que además de ser las áreas más grandes, son las que mayor contacto tienen con el público y eso las tiene en la mira ciudadana.
Con el nuevo sistema que tiene la Contraloría, donde la aplicación va de la mano, se logra hacer una denuncia más completa con datos esenciales de modo, tiempo y lugar e incluso algunas pruebas, evitando la generalización de hechos que no permiten llegar a un punto específico.
Esto, dijo, busca ir más allá de ese 10 por ciento sin que el poblador tarde más de tres minutos en hacer la denuncia, queja o reconocimientos, y sin que sea necesaria la intervención de algún abogado, desde la comodidad de su hogar, oficina o un internet público.
El objetivo, indicó, es hacer todo más preventivo, evitar que las conductas erróneas pero si ya se cometió la falta, sancionar conforme lo marca la Ley de Responsabilidades y las normas aplicables.
Para ello el servidor sabe que existen todos los elementos a su alcance para proceder frente a cualquier falta y han dado muestras de que sí se aplica la ley, desde la amonestación hasta la destitución e inhabilitación para ocupar nuevamente cargos en el sector público.
Lo ideal, dijo, es que disminuyeran sensiblemente los castigos pero a lo largo de los años han permanecido porque a pesar de los cursos, la capacitación y las consecuencias, hay quien reincide, no respeta los procesos o no quiere hacer caso.
A través de la Aplicación, recién lanzada en el último trimestre del año pasado, esperan hacer más fácil la denuncia y darle seguimiento, sin necesidad de ratificar ni dar sus datos, por aquellos que tienen miedo de sufrir represalias.
Aunque está este sistema vigente desde hace algunos años y ya existe una app, hay quienes siguen prefiriendo acudir personalmente, incluso hasta contratar a alguien que les haga algún escrito, otros recurren al teléfono o internet, pero cuando menos uno de cada dos es a través del Sistema de Atención Mexiquense.
Ahora, señaló, los plazos son más cortos y de tres días que se tardaba en radicar una queja, bajó a 24 horas.
LC