Ivanka Trump, hija del mandatario estadunidense Donald Trump, podría ser una de las candidatas para dirigir el Banco Mundial, luego de que su presidente anunciara que dejará el cargo en febrero, tres años antes de que concluya su mandato, reporta Financial Times.
"Los posibles nombres ya están flotando en Washington, incluyendo a David Malpass, un alto funcionario actual del Tesoro en asuntos internacionales, Nikki Haley, ex embajadora en la ONU, Mark Green, jefe de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, e incluso Ivanka Trump, la hija del presidente", indica en una nota el diario financiero.
Y es que la sorpresiva salida de Jim Yong Kim supone un importante desafío para el presidente estadunidense, Donald Trump, muy crítico con el multilateralismo y quien deberá nombrar a un candidato que sea respaldado por el resto de la comunidad internacional.
Instaurado en 1944, junto con su institución hermana el Fondo Monetario Internacional (FMI), en el marco de los acuerdos de Bretton Woods, la tradición establece que es Estados Unidos quien nombre al presidente del Banco Mundial mientras que Europa escoge al del FMI.
"Creo que desde luego, y siguiendo con la tradición, EU nominará a un candidato. Aunque preveo muy incierto saber qué ocurrirá en esta ocasión (...) dado que este presidente (Trump) no es terriblemente popular entre el resto de países", explicó a EFE Scott Morris, exfuncionario del Tesoro estadunidense.
La tarea no será fácil ya que el Banco Mundial, bajo la dirección de Kim, se ha convertido en una de las puntas de lanza del combate contra el cambio climático y el calentamiento global, cuestiones ante las que Trump ha mostrado un beligerante escepticismo pese a las evidencias empíricas.
De hecho, el mandatario anunció la retirada de Estados Unidos del Acuerdo del Clima de París poco después de llegar a la Casa Blanca, una medida severamente criticada por socios y aliados, al asegurar que es un desastre para los intereses de su país.
El Banco Mundial es, asimismo, una de los cimientos del sistema multilateral, algo también objeto de reiterados ataques por parte del magnate neoyorquino; y la institución ha aportado cientos de millones de dólares en préstamos para el desarrollo de China, que considera Pekín como su gran adversario global.
Por ello, la salida tres años y medio antes de lo previsto de Kim, designado por su predecesor Barack Obama, genera un importante vacío diplomático y obliga a Trump a dar un paso al frente.
Para Morris, esta situación supone un "verdadero desafío" para la Administración estadounidense.
"Podría ser un problema real que por primera vez en la historia el candidato de EU sea rechazado por el Banco Mundial, por lo que exige un grado de aperturismo mental por parte de Washington para escoger con cuidado su candidato que sea aceptable por el resto de países", afirmó el experto.
Es de prever, además, que como ocurrió durante la selección de Kim aparezcan otros candidatos que pongan en entredicho el acuerdo tácito entre Estados Unidos y Europa con el argumento de exigir mayor representación de los mercados emergentes, aunque lo más probable es que el resto de países aguarde a la propuesta de Trump.
Entre los nombres que se han comenzado a escuchar destaca Indra Nooyi, india-estadunidense y ex consejera delegada de PepsiCo, que ofrece la opción a Trump de nombrar a la que sería la primera mujer al frente del Banco Mundial sin provocar revuelo internacional.
Con información de Financial Times y EFE
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