Con un lacónico "déjenme hacer" respondió hoy el presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, a las sucesivas preguntas sobre el "brexit" formuladas con motivo de la inauguración de la presidencia rotatoria de la UE por parte de Rumanía.
El hecho de que el próximo martes el Parlamento británico vote el acuerdo alcanzado entre Londres y Bruselas para la salida del Reino Unido de la UE, "brexit", ha centrado parte de la atención de las comparecencias públicas de Juncker en Bucarest.
Sin moverse de la posición comunitaria frente a dicho acuerdo, en el sentido de que no se renegociará y de que es el "mejor" posible", Juncker dio a entender que prosigue los contactos con la primera ministra británica, Theresa May, hasta que llegue el momento de la votación en la Cámara de los Comunes.
Según coinciden en afirmar fuentes comunitarias, el "déjenme hacer" debe interpretarse como un esfuerzo por parte de la CE para que dicho acuerdo salga adelante, lo que significaría que Bruselas está intentado aclarar las eventuales dudas de Theresa May para facilitar sus negociaciones en Londres.
Sin embargo, a partir de que se produzca la votación del martes, Bruselas esperará a que Londres le diga, "qué paso es el siguiente", añaden las fuentes. Efe