Hace unos días se ha emitido la mayor sentencia económica de este país (3,3 millones de euros) por una negligencia médica contra un profesional, una institución y una aseguradora por un error en el parto. Los pacientes deben estar protegidos ante cualquier anormalidad en los procedimientos o mala praxis por parte de los médicos o los hospitales. Acceder a la carrera de Medicina (seis años) exige una de las mejores notas de entrada a la Universidad. Al finalizar, hay que hacer un examen (el MIR) nacional y, según la nota que se obtiene, se puede elegir la especialidad y el hospital, lo que supone otros cuatro o cinco años.
Tras 11 años de estudios y formación el especialista empieza de cero. 3dos los médicos tienen que estudiar a lo largo de su trayectoria profesional para mantenerse actualizados dada la constante innovación médica. Los cirujanos deben aprender y practicar mucho para alcanzar el nivel de excelencia requerido. A pesar de ello, es imposible garantizar el cien por cien de los resultados por la variabilidad de factores y las particularidades de cada proceso.
En estos tiempos, podemos decir que en la mayoría de los diagnósticos y tratamientos se alcanzan muy altos niveles de resolución. Los médicos, además, disponemos de guías clínicas por especialidad (europeas y americanas), que son las referencias de la mejor sabiduría y evidencia alcanzada hasta este momento a nivel mundial. Estas guías están disponibles para cualquier profesional y los artículos de investigación y la asistencia a congresos nos permiten estar al día y resolver dudas. Además, estamos obligados a tener un seguro de responsabilidad civil.
Todo esto tiene que ser así, puesto que nuestras decisiones y actuaciones tienen consecuencias importantes sobre las vidas de las personas que tratamos y también en sus familias.
La próxima semana analizaremos la responsabilidad de los políticos.