El PSPV se ha quedado finalmente sin apoyos para su declaración institucional sobre el trasvase Tajo-Segura. Los socialistas trataban de impulsar un texto en las Cortes Valencianas después de que el Ministerio de Transición Ecológica paralizara una transferencia de 20 hectómetros cúbicos para los regantes previstos para noviembre y sólo autorizara el envío de 7,5 con destino exclusivo a abastecimiento humano. Todo ello el mismo día que el jefe del Consell, Ximo Puig, haya anunciado que va a instar a la Abogacía de la Generalitat a la presentación de un recurso contencioso contra la orden.
La resolución tenía el objetivo de «recordarle al Gobierno de España» que esta infraestructura «es innegociable». Para ello, se pretendía instar al Ejecutivo central a mantener el aporte de agua del Tajo-Segura en las condiciones y términos que establece la normativa actual, incluyendo la consulta a la Generalitat Valenciana y a los propios usuarios sobre las necesidades semestrales y mensuales. «Asimismo, solicitamos que la Comisión de Explotación del Acueducto Tajo-Segura se reúna siempre en la primera semana hábil del mes, con la salvedad de contar con dos días para realizar el balance del día 1 de cada mes», añadían.
La declaración, sin embargo no ha salido adelante al no contar con la firma del resto de grupos, ni siquiera de sus socios de Gobierno. Tanto a Compromís como a Podemos no les gustaba el planteamiento y preferían llegar a un acuerdo sobre la base de un texto alternativo que había elaborado el PP.
Exigencias a Sánchez
Los populares querían mostrar el rechazo al recorte de este trasvase de 20 a 7,5 hectómetros cúbicos y también para instar al Gobierno a presentar los Presupuestos, que éstos incluyan un mínimo de 1.200 millones para la Comunidad y que no se autoricen peajes en la AP-7 cuando acabe la concesión.
La portavoz del grupo, Isabel Bonig, ha lamentado que el PSPV no haya querido rubricar algo «tan claro» y que refleja resoluciones aprobadas esta legislatura en Las Cortes, que el PP sí firmó cuando gobernaba Mariano Rajoy.
Bonig ha señalado que la última orden sobre el trasvase Tajo-Segura supone «un varapalo» y un «incumplimiento» de la paz sobre el agua, y ha acusado a los socialistas de «quitar» a los valencianos 12,5 hectómetros cúbicos, ante lo cual el PP acudirá a los tribunales.
«Qué lastima que Puig y el PSPV no hayan querido aprobar esta declaración que dice sí al Tajo-Segura, sí a las inversiones y sí a la defensa de los derechos de los valencianos», ha remarcado Bonig, a quien no le «sirven» los discursos que Puig hace en Las Cortes «porque después en Madrid no tiene la suficiente valentía para plantarse frente al Gobierno de Sánchez».
Al no haber conseguido apoyos para su texto y haberse negado a firmar el del PP pese a que el resto de grupos estaban dispuestos, finalmente el Parlamento autonómico no ha logrado cerrar un acuerdo sobre esta cuestión.
