Me parece patético que la selección mexicana de futbol tenga que ir a perder dos partidos a Argentina, contra la selección local, para que algunos descubran que en ese país se trabaja mucho mejor que en el nuestro en el rubro de dar oportunidad a los jóvenes.
Ahora resulta que ese es el descubrimiento principal de la gira. Y que se diga, además, en un tono justificativo es todavía más insoportable.
Se sabe también que en la Liga argentina se debuta a muchísimos jugadores porque cada semestre se vende a un número de elementos proporcional a diversas ligas de futbol del planeta.
Hay un gran mercado, compuesto por promotores, directivos, representantes… Pero además al joven argentino le entusiasma el reto de irse de su país para mejorar condiciones, para aventurarse y encontrar el triunfo. Eso es casi irrepetible. Y más en un país o en una Liga como la mexicana.
Aun así, el futbol argentino recibe a una buena cantidad de veteranos o expatriados y también una buena dosis de talento de países del área, sobre todo de Paraguay, Uruguay, Chile y Colombia. Tiene la ventaja de unos tres años a la fecha de que su primera división creció prácticamente al doble al sumar a la totalidad de los equipos de la división B.
Si eso pasara en México, integrando la Liga Mx con 26, 28 o hasta 30 equipos seguramente los equipos tendrían más posibilidades de apelar al talento nacional.
Pero bueno. Y lo más importante. ¿De cuándo acá el modelo a seguir es el futbol argentino? ¿Alguien ha visto últimamente partidos de su Liga? Son aburridísimos. Solo la pasión que se vive en las tribunas le da cierto sentido. Y si hablamos de su selección nacional, pese al indudable talento de sus jugadores (que actúan en los principales equipos europeos), pues no ha sido precisamente la que mejores resultados ha dado.
Creo que futbolistas y entrenadores deberían encontrar un mejor ejemplo para compararse.
