Con toda probabilidad los Reyes visitarán Cuba el próximo año, en la que sería la primera visita oficial de unos monarcas españoles a la isla caribeña. Un viaje que culminaría con el proceso de acercamiento entre España y la isla caribeña.
La relación diplomática y comercial ya existía, pero con su visita Sánchez ha querido imprimir un acelerómetro político a las relaciones, que a partir de ahora tendrán un carril institucional por el que discurrir en virtud del memorándum de consultas políticas suscrito ayer por ambos Gobiernos.
Aunque la isla ya había manifestado interés por recibir a Felipe VI, es ahora el Gobierno el que parece especialmente interesado en que se lleve finalmente a término. Fuentes gubernamentales confirman que en su encuentro con Miguel Díaz-Canel el presidente español fue el que trasladó que «le haría ilusión» que esa visita pueda producirse.
Según estas mismas fuentes la propuesta de Sánchez fue recibida por Díaz-Canel con «expectación y aceptación». La visita se producirá por tanto con total seguridad el próximo año, con motivo del 500 aniversario de la fundación de La Habana. Desde el Gobierno ya se había trasladado que un fecha tan señalada «pedía a gritos una presencia española de altura».
