El turismo en la Isla está presentando dificultades con la calidad de sus servicios y entre las causas hay factores objetivos, pero también se suman otros subjetivos, según reconoció el titular del ramo, Manuel Marrero Cruz, durante un encuentro que sostuvo este jueves con los delegados a la 2da. Conferencia Nacional del Sindicato Nacional de Hotelería y Turismo.
Marrero Cruz aseguró que en la calidad de los servicios está la clave para poder llegar a los cinco millones de visitantes que se tienen previstos para el año venidero, y, de manera integral, poder crecer en el sector, como se venía creciendo antes de que el huracán Irma detuviera los niveles de ascenso que eran en ese momento de 26,5 por ciento de un año en relación con el anterior.
Señaló a excesos de procesos burocráticos y falta de gestión como el cardo de cultivo para que la ineficiencia fustigue algunas instalaciones turísticas. Igualmente, precisó que hay manifestaciones de falta de ética y de exigencia que empañan la imagen y frenan el buen desempeño en algunos lugares del sector.
Por esa razón llamó al sindicato a sumarse a la batalla por la calidad, porque la mala calidad hace tanto daño como el robo, pues genera una afectación comercial que desemboca en una afectación económica, según precisó.
Se refirió a las nuevas formas de gestión no estatal como una experiencia que ha apoyado a la actividad turística en la Isla. Un poco más de 2 000 restaurantes o paladares y 24 217 habitaciones forman parte de los servicios turísticos que ofrece el país, y coadyuvan a que 2018 pueda concluir con cerca de 4 750 000 visitantes.
Marrero explicó que con las nuevas regulaciones se aprueba que el Ministerio de Turismo (Mintur) rectore lo relativo al alojamiento turístico, lo cual no constituye un freno a la forma de gestión no estatal, como difaman algunos fuera de Cuba para retar importancia a los cambios económicos que acomete la Isla.
Precisó que el Mintur tiene la obligación y voluntad de ayudar al sector no estatal para que tenga como referencia las normas internacionales —agua caliente, aire acondicionado, buena higienes y seguridad…—, pero no pone como condición que obligatoriamente todo se rija por esos estándares. Aclaró que se puede alquilar sin aire acondicionado, pero no se le puede mentir al cliente a la hora de venderle el servicio.
También se refirió a la gestión de las 18 cooperativas no agropecuarias asociadas a la actividad turística que de manera experimental están funcionando. Estimó que eran más, pero que ha habido que cerrar algunas y otras están a punto de quebrar, pues aunque han cambiado la forma de gestión, todavía el cambio de mentalidad no asoma en algunas de estas entidades.
En la Isla actualmente hay 69 514 habitaciones hoteleras con estándares internacionales. Las mismas se encuentran en 393 hoteles. El 76 por ciento de esos recintos aplican en la categoría de cuatro y cinco estrellas.
El miembro del Buró Político y Secretario General de la Central de Trabajadores de Cuba, Ulises Guilarte de Nacimiento, se encontraba presente en este encuentro con los delegados a la 2da. Conferencia Nacional del Sindicato Nacional de Hotelería y Turismo.
