El servicio de carsharing WiBLE, impulsado por Kia y Repsol, cumple su quinto mes de funcionamiento con 45.000 clientes activos y “buscando llegar a municipios dónde, hasta ahora, no había presencia de movilidad compartida”, ha señalado Javier Martínez Ríos, CEO de WiBLE.
Tras comenzar su andadura el pasado mes de junio, convirtiéndose en el primer servicio de carsharing en acercarse a municipios como Pozuelo, Villaverde o Las Tablas; ahora, llega más allá al norte de la capital, “ampliando el área de actuación, con zona freefloting, a Alcobendas y Campo de las Naciones”, ha desvelado Javier Martínez Ríos.
Los nuevos barrios madrileños, en los que se están cerrando los últimos detalles, cubrirán “la zona empresarial de Alcobendas, al lado de Diversia y el metro de La Moraleja, así como una pequeña área, en el centro del municipio, que lo conectará con cercanías”.
Con respecto a Campo de las Naciones “el espacio operativo de WiBLE cubrirá todo el perímetro que rodea las instalaciones de IFEMA y parte de la zona empresarial”. Dos nuevas zonas, al norte de Madrid, que “buscan facilitar las necesidades de los usuarios en barrios con mucho movimiento y dónde trabajan más de 90.000 personas”, ha señalado Martínez Ríos.
Ante la entrada en vigor de la nueva Zona de Bajas Emisiones Madrid Central el próximo viernes 30 de noviembre, y los distintos escenarios de contaminación aprobados a finales de octubre, “el carsharing se ha convertido en una alternativa clave para moverse por la ciudad”, destaca el CEO de WiBLE.
Ante la nueva normativa de circulación en Madrid, los 500 Kia Niro Híbrido Enchufables de WiBLE, como vehículo etiqueta cero emisiones, pueden “circular por toda el área de Madrid Central, estacionar libremente y sin límite de tiempo en las zonas S.E.R., circular y aparcar en todos los escenarios del nuevo protocolo por alta contaminación, así como salir de la M-30 gracias a su gran autonomía”, añade Martínez Ríos.
Además, las nuevas políticas de movilidad han convertido a las bases situadas en la periferia en parkings disuasorios para los vecinos de los barrios aledaños; “son una gran alternativa ya que permiten intercambiar el vehículo privado por un WiBLE, con la idea de facilitar el acceso a la ciudad a vehículos ecológicos, que pueden circular sin ningún tipo de restricción”, ha puntualizado Martínez Ríos.
A las bases ubicadas a las afueras, se suma el servicio de parkings privados operativos en el centro de la ciudad (Galileo, Bilbao, Avda. de Burgos, Padre Damián, Colón, General Diaz Porlier y Casino de la Reina), que “facilitan el aparcamiento y ahorran tiempo a los usuarios”, ha concluido Martínez Ríos.