Con la llegada del frío aumentan los gastos en calefacción y electricidad. Encender los radiadores o activar la calefacción de gas natural puede conllevar un desembolso de 800 euros anuales en el caso de un piso y alrededor de 1.400 euros en el caso de una casa. Conviene tener en cuenta también que las las tarifas de último recurso (TUR) de gas natural han subido de media un 10% este trimestre con los precios en máximos históricos.
Para evitar tirar el dinero y ahorrar al máximo en calefacción, el aislamiento de una vivienda es clave. «Aclimatar una vivienda suele incluir acciones básicas como sellar puertas y ventanas, instalar más aislamientos en los áticos y proteger las tuberías para que no acaben congeladas y se dispare el gasto», explica Corinna Vernet, country manager de Brico Privé, el grupo de ventas privadas dedicadas al bricolaje, la jardinería y el hogar.
En definitiva, se trata de combinar la eficiencia y el ahorro económico con el objetivo de preparar nuestro hogar para optimizar al máximo el rendimiento del sistema de calefacción. Para llegar a esta meta, Brico Privé ha confeccionado una lista de medidas a tener en cuenta.
1. Aísla térmicamente tu vivienda. Los muros de nuestras casas no están del todo bien aislados y esta situación suele generar pérdidas de calor que se traducen en un mayor consumo eléctrico y de gas. Por ello, habría que revisarlos y valorar su estado.
2. Revisa el sistema de calefacción. Es necesario cuidar los sistemas de calefacción instalados en nuestra vivienda mediante la purga de radiadores o vigilando la presión.
3. Sella bien las ventanas. Evitar las filtraciones de aire a través de las ventanas es una acción básica que permitirá conservar el calor interior, al mismo tiempo que ahorrará la necesidad de elevar el termostato de la calefacción. Por ello, es importante apostar por ventanas de calidad, ya que pueden reducir hasta un 70% las pérdidas energéticas del hogar.
4. Utiliza elementos de decoración que sean aislantes. Se pueden poner alfombras en grandes espacios, así como utilizar las cortinas como una nueva capa aislante y mantener las persianas bajadas en los días de más frío.
5. La chimenea como punto limpio y seguro. En el caso de que nuestra vivienda tenga una chimenea, su mantenimiento debe ser prioritario ya que es imprescindible por seguridad. Debemos solicitar los servicios de un deshollinador para limpiarla y acondicionarla para así evitar incendios y otros problemas.
6. Revisa las tuberías de agua y gas. Si están expuestas a las bajas temperaturas del exterior o pasan por piezas de la casa que no poseen calefacción corren el peligro de congelarse y estallar. Por esta razón, antes de prender el sistema de calefacción de tu casa, asegúrate de revisarlo y repararlo si es necesario.
7. Aprovecha la luz solar. Aunque estemos en periodo otoñal no debemos menospreciar el calor que emite el sol. Se trata de una fuente de calor gratuita que puede resultar de gran ayuda para evitar pagar de más en las facturas a final de mes. Con los rayos solares puedes aumentar la temperatura en tu casa de forma natural dejando las cortinas abiertas durante el día para que entre la luz y cerrándolas cuando el sol se ponga para evitar pasar frío.